La loba y el cazador 🐺🏹

Capitulo 16

Narra Katherine:
Corro por el bosque con Oliver en mi lomo para llegar a mi reino y dar una explicación a mis súbditos, ya que solo yo podré hacerlos entrar en razón, al llegar a mi castillo por la puerta de atrás hago que Oliver se baje y cuando él ya no está encima de mi me transformó en humana.

Corro hacia la puerta principal donde 5 guardias esperaban mi llegada, las puertas estaban abiertas dejando entrar el ruido de las voces de los licántropos.

— ¡¡Silencio!!— rugí y todos guardaron silencio — ¡¿Que es todo este alboroto?!— otra vez comenzaron a gritar todos al mismo tiempo — ¡Silencio, me reuniré solo con los Alfas, Lunas y Betas de cada manada para aclarar esta situación!—

Los guardias dejaron entrar solo a las Licántropos de alto rango que mencione los dirigí a la sala del consejo licántropo, todos le gruñían a Oliver pero él no se inmutaba ante eso yo tome su mano y entramos a la sala juntos.

— ¿Que hace ese cazador aquí?— gruño la Luna de la manada del norte, rugí para que todos me prestaran atención y se callaran, Hayley sometía a sus lobos para que nadie se fuera a transformar o fuera a hacer algo indebido que pusiera a nuestro mate en riesgo.

— Él es Oliver Cazares, rey de los cazadores y mi mate ósea su futuro rey— todos me miraban sorprendidos.

— ¿Entonces fue por eso que firmaron un tratado de paz?— pregunto el Alfa de la manada del oeste.

— Exacto, ya nunca estaremos en guerra, ya no tenemos que preocuparnos por eso—

— Si, pero los cazadores nos deben mucho, tuvimos muchas perdidas por su culpa— dijo el Beta del norte.

— No solo nosotros hemos tenido perdidas ellos también— hablaba tranquilamente mientras que los Alfas, las Lunas y los Betas miraban con odio a Oliver.

— Yo no creo que los cazadores vayan a cumplir su parte, son humanos mas evolucionados pero humanos a fin de cuentas su naturaleza es traicionar incluso a sus compañeros de vida— dijo la Luna de la manada del sur.

— Eso no es verdad, ustedes tienen una idea muy equivocada de lo que nosotros somos, si somos humanos y hemos evolucionado por eso es que ya no cometemos los mismos errores, si seguimos cometiendo errores como ustedes pero de ellos aprendemos al fin y al cabo somos más parecidos de lo que les gustaría admitir, ustedes son en parte lobos y en parte humanos— sonreí por que de verdad demostraba ser un excelente rey ya nadie dijo nada.

— Ahora si creen que la decisión de los dioses es equivocada entonces hablemos con el sumo sacerdote, recuerden que los dioses le hablan y a través de él pueden comunicarle su descontento de nuestra unión y ya veremos que acciones toman los dioses al respecto— todos bajaron la cabeza.

Saben que nadie puede ir en contra de las decisiones de los dioses Hayley dejo de someter a sus lobos para que pudieran transformarse y jurarle lealtad a Oliver, después de transformarse bajaron la cabeza y la mirada, al pasar Oliver por enfrente de ellos ninguno gruñía, todos al bajar la cabeza a su paso.

Le habían jurado lealtad y no podían romper esa lealtad a menos de que quisieran morir.

— ¿Como supo lo que tenía que hacer?— le pregunté a mi loba por el vínculo.

— Yo le dije— sonreí y cerré la conexión con mi loba, salimos de la sala del consejo Licántropo y los Alfas juntos a sus Lunas y Betas salieron detrás de nosotros.

Cada Alfa se fue con su manada y les explicaron la situación entonces habíamos resuelto lo que pudo haber sido un levantamiento en contra del tratado de paz y eso habría desatado otra guerra innecesaria, pronto se dará a conocer la noticia por todo el mundo.

— Creó que acabamos de evitar una crisis que pudo terminar muy mal— me reí y nos besamos, escuche a alguien aterrizar, entonces el olor de Wyatt y Cassidy se hizo presente, nos separamos para ver a mis amigos caminar hacia nosotros.

— Veo que ya no necesitas de mi ayuda— dijo mi mejor amigo con diversión.

— Oh vamos es Kat ¿cuando ha necesitado de tu ayuda?— le respondió Cassidy.

— Te sorprendería saber la respuesta— le dije yo.

— Oye mi coronación será mañana y pues quiero saber si ¿irían?— mire a Oliver y él asintió.

— Si claro no nos lo perderíamos por nada, ademas no todos los días coronan a mi me mejor amigo rey de los dragones—

— Yo le dije que no era necesario pero el siente que por unos días que no han estado comunicados se le va a ir la vida—  nos reímos, el día lo pasamos con ellos, bromeando y cosas así.

Al día siguiente me desperté por unos besos en mi cuello, no pude evitar gemir.

— Buenos días mi reina— sonreí y abrí lentamente los ojos.

— Buenos días mi rey— nos besamos, el beso comenzó cariñoso pero se fue tornando apasionado pero nos separamos por falta de aire.

— No se por que pero amanecí muy excitado y cuando te vi dormida no pude evitar besar tu cuello—

— Hemos empezado nuestra semana de celo— sonreí ante el aviso de mi loba.

— Veras los lobos tenemos una semana de celo y creo que ahora que eres mate de una loba pues también te afecta—

— Pues vamos a tener que resolver esto antes de la coronación de Wyatt— sonreí, comenzamos a besarnos de nuevo con pasión y deseo esto se había convertido en una guerra amorosa por el control de la situación, no va a ser fácil pues yo no soy una sumisa y él tampoco pues ambos somos gobernantes y eso complica un poco las cosas, nos fuimos quitando la ropa.

— Tu piel, tu cuerpo, tu alma y toda tu me pertenecen— dijo mientras besaba mis pechos y los mordía bueno no al mismo tiempo pero mientras que a uno lo mordía al otro lo apretaba en su mano yo solo respondía con gemidos — Di que eres MÍA—

— Soy tuya— fue bajando por mi abdomen dejando un camino de besos y mordidas yo y Hayley estábamos mas que excitadas, volvió a subir y en mi cuello.

Succionó mi piel me quedaría marca su marca ya que él no tenía colmillos pero esa era su manera de reclamarme, cambie la posición ahora estando yo arriba, admiraba su cuerpo perfecto lo bese.

— Eres mío y me vas a pertenecer por toda la eternidad— fui bajando mis besos a su clavícula mis colmillos salieron sin mi permiso.

— Hazlo, márcame y conviérteme en uno de los tuyos— será el primer híbrido de cazador y licántropo pero lo torturaría un poco, baje mis besos y guarde mis colmillos él gimió frustrado, pero me senté en su pene, haciendo que me penetrara solté un gemido y un rugido al mismo tiempo, me dolió un poco por que yo aun era virgen.

Pero pronto fue pasado el dolor y se convirtió en placer, entonces comencé a moverme haciéndonos gemir a ambos y cuando estábamos llegando a la cima saque mis colmillos y lo marque como mío, en ese momento alcanzamos el orgasmo y él cayo en un sueño con una sonrisa en su rostro, yo me recosté en su pecho y también me dormí.