Una Nueva Oportunidad [Star Wars] [Reylo]

Peligrosos

Kaydel estaba corriendo por los pasillos de la zona médica buscando a su amiga Rose, extrañamente no la encontraba por ningún lado.
Hace algunos minutos se había encontrado con Poe el cual furioso le gritó que Rey había vuelto y que les había mentido a todos. Kaydel ni siquiera pudo entenderlo pero al menos sabía que Rey estaba de vuelta y Rose tenía que saberlo.

- Rose ¿dónde estás? - murmuró para sí misma saliendo de la zona médica, entonces recordó que Armitage tampoco estaba allí - El jardín... quizás estén allá.

Mientras tanto, Rose estaba junto a Hux sentados en una banca del jardín central, la haysiana estaba llorando por lo que había ocurrido aquella mañana con Finn, y Hux simplemente estaba allí, sin saber qué hacer.

- ¿Por qué no me dejaste contarle a aquel hombre que había recordado algo? - preguntó el pelirrojo viendo a la haysiana secar sus lágrimas.

- Él no tiene que saberlo, se hubiera enfadado... - respondió Rose pasando sus manos por sus mejillas intentando quitar todo rastro de su llanto.

- ¿Por qué? ¿Qué hay de malo?... ¿Es porque mi recuerdo se trata de ti? - interrogó Hux llamando la atención de la pelinegra.

- Finn hubiera malinterpretado las cosas... él es mi novio, y yo lo quiero mucho, no quiero lastimarlo - murmuró Rose decepcionada de sí misma.

- ¿Por qué lo lastimarías?... Rose, no te entiendo - Hux se quedó mirándola esperando alguna respuesta.

Pero Rose no sabía qué decir, tenía miedo de sus sentimientos y todo por culpa de él.

- Me cuesta mentirle a Finn y sobre todo a mí misma, creo que él está sospechando y no podré ocultar esto que siento por tanto tiempo... - dijo Rose reuniendo el valor suficiente para continuar.

- ¿Por qué dices que mientes? ¿Qué es lo que ocultas? - volvió a cuestionar Hux ganándose una mirada profunda por parte de Rose.

- Armitage... perdóname.

Rose tomó el rostro de Hux en sus manos y acercó sus labios a los suyos disfrutando la suavidad de éstos por unos segundos y después se alejó totalmente avergonzada de lo que había hecho.
Hux estaba sonrojado y sorprendido a la vez, pero quería más. Él mismo se acercó a ella y atrapó los labios de la haysiana sintiendo algo nuevo dentro de él, pero si estaba seguro de algo, era de que jamás se había sentido así con alguien, besar a Rose era darle paz, calma y sobre todo amor, cosas que siempre le faltaron en el pasado.

Rose estaba disfrutando de los labios del pelirrojo y entonces sus dudas se esfumaron, estaba claro que se había enamorado de él y no podía negarlo, ya no era una simple compasión, ahora era amor, puro y dulce.

- Rose... - escucharon detrás suyo.

Ambos se separaron y miraron hacia atrás encontrando a Kaydel paralizada y con una expresión de horror en su cara.
La rubia permaneció quieta por unos segundos y después salió corriendo alterada por lo que había visto.

Rose y Hux se miraron al mismo tiempo y ambos fueron detrás de ella, Kaydel se detuvo a mitad del pasillo para tomar aire y tratar de calmarse.
No faltó mucho para que la alcanzaran, la rubia estaba asustada y veía a su amiga como si no la conociera.

- Kaydel, escúchame - pidió Rose intentando tocar sus manos.

- ¡No!... ¡Yo los vi! ¡Lo vi todo! - exclamó la rubia retrocediendo dos pasos hasta apoyarse en la pared - T-tú besaste a Armitage... ¿Por qué?.

- Kaydel, por favor cálmate, nadie debe saber esto y muchos menos Finn - pidió Rose con un nudo en la garganta - Sé que estuvo mal... pero ya me cansé de mentir...