夜空の下の夢 - My Hero Academia

04

En esta ocasión el episodio estará enfocado en otros personajes que formaron parte importante en la vida de Kurumi, ¡gracias por su atención, hermosa humanidad!

Después de que Kurumi abandonara la enfermería, la heroína a cargo del lugar siguió mirando fijamente la puerta por donde había salido, justamente estaba recordando el día en que esa joven había ingresado por primera vez.

-Buenos días, disculpe ¿aquí es la enfermería?- una chica alta pero de aura introvertida entró a la enfermería.

-Sí jovencita, pero tendrás que esperar a que me desocupe un poco con este paciente- en un día de clases ya Recovery Girl tenía trabajo con algunos estudiantes que se habían lastimado entrenando y el lugar se encontraba algo lleno.

-No se preocupe, solo vine a buscar una curita, me corté un poco trabajando en el taller- empezó a reír a la vez que rascaba su nuca con una de sus manos totalmente cubierta por la manga de su uniforme.

La mayor aún concentrada en su labor señaló el lugar donde se encontraba lo que necesitaba la chica, lamentaba no poder atenderla pero estaba al borde de los nervios porque eran demasiados pacientes y la noche anterior no había podido dormir bien.

-Los pacientes de la segunda y última camilla deben ser priorizados. Recomiendo enyesar el brazo izquierdo del primero, su radio podría estar en riesgo de fractura y si no lo coloca en reposo su húmero también sufrirá. El segundo está respirando profundamente porque presenta fractura de costilla, si no se actúa rápido puede perforar su pulmón, si no está conforme con mi diagnóstico podría acudir a una exploración ósea. 

La pelimagenta tapó su boca al darse cuenta que se dejó llevar y habló de más, otra vez.

-Lo siento, no la interrumpo más. Que tenga un buen día- antes de que pudiera abrir totalmente la puerta, un objeto que impactó contra ella provocó que se cerrara bruscamente y la chica retrocediera algo asustada.

-Niña, ¿dónde aprendiste sobre los huesos? Y segundo, ¿cómo es que pudiste ver todo eso?- Recovery Girl se alejó de donde estaba para poder llegar a donde estaba esa jovencita.

-E-Es mi Don, tengo visión de rayos X.

-Ya veo- miró con detenimiento los rasgos de ella- esa línea azul en tus ojos, se parecen a los de Lady Röntgen, ¿acaso tú...?

-¡Ni hablar! ¡Eso es impensable!- su apariencia tranquila se había desvanecido por completo, claramente se veía que estaba alterada por haber escuchado el nombre de esa heroína profesional. Rápidamente recobró la compostura y se calmó- Disculpe mi reacción, yo... no tengo nada que ver con ella- desvió la mirada decepcionada de sí misma por haber tomado esa actitud antes.

-No te preocupes, ¿cuál es tu nombre?- todavía más sentía curiosidad por ella, se preguntaba si era o no la hija de Lady Röntgen. Y si fuera así, ¿por qué negaría a su madre? Esa y miles de incógnitas surgían en su mente- Yo soy la heroína juvenil Recovery Girl, estoy a tu servicio- extendió su mano para estrecharla.

-Es un placer, mi nombre es Kurumi. Tsukimori Kurumi, también para servirle- con un poco más de confianza acercó su mano para corresponderle a la mayor.

-Después de eso, venías cada día sin falta en tus horas de descanso para ayudarme- decía nostálgica mientras seguía mirando la puerta de la enfermería- aún así, tuve dudas sobre ti y acudí a los que pude para aclararlas.

-¿Tsukimori Kurumi? Ah, hablas de Tsuki-chan, ¿no es acaso un encanto?- Nezu, el director de la academia, se encontraba tomando a gusto su té- ¿Qué sucede con ella, Recovery Girl?