Cap. VI

6.2K 467 338
                                    


Ya de día, el rubio se levanta más sonriente que nunca. No deja de pensar en lo hermoso que fue aquel beso y lo suave de los labios de Nezuko. Sus queridos amigos notan lo extraño que actúa el espadachín respiración de rayo, pero Tanjiro no pregunta nada. Le es agradable y no tiene ningún problema con que su amigo se encuentre feliz. Pero de lo que no tiene ni la mas remota idea es que Zenitsu se ha besado con su querida hermana, de lo contrario si habría conflicto.

—¡Hey, tú! ¡Ven aquí!

—¿Inosuke? ¿Qué quieres, hombre?

—No me has contado lo que pasó con la hermana de Gonpachiro.

—¿Ah? ¿Quién es ese? —dice curioso.

—Gonpachiro.

—¿Gon... Qué?

—¡Idiota! ¡No reconoces a tus propios compañeros! ¡Te voy a dar un golpe que no olvidarás, cabeza de estropajo!

—¡Lo siento! ¡¿Hablas de Nezuko?!

—¿Ah? Sí, ella.

Inmediatamente Inosuke se calma y unta toda su atención al joven dado que le interesa saber.

—Bueno... —sin darse cuenta sonríe bajando la mirada—. Nos dimos un beso.

—¿Eh? —Se quita la cabeza de jabalí atónito.

—Ella se me acercó muy extraño y quedó encima mío, no sé la razón pero fue después de que le até el listón al cabello.

—¿Qué? ¡Estás demente! ¡¿Sabes qué pasará si se llegase a entera Tanjiro?!

—Uh, dijiste su nombre correctamente.

—¡A quién carajos le importa!

—Le he dicho que me gusta, pero no creo que lo comprenda.

—¿Por qué te gusta esa mujer? Dime, ¿Qué te atrae? Hay muchas chicas hermosas que cuidan bien de nosotros y te fijas especialmente en un demonio sin sentimientos que ni un hola te ha dicho.

—Ella es hermosa, Inosuke.

—¡No me hagas reír! —dice con sarcasmo.

—No tengo nada que explicarte ante eso, porque sé que aún así jamás lo entenderás

—¿De qué mierda me hablas? ¿Intentas defenderla así?

—Nezuko tiene un sonido hermoso apesar de ser un demonio. Su sonido transmite fortaleza, honestidad, esperanza..., y con sólo escucharla sé que tiene todo para mi gusto. Es algo que nunca vas escuchar pues no eres yo.

—Me estás jodiendo un poco.

—¿Y? ¿Vas a golpearme?
—lo mira frunciendo el ceño.

—Si eso quieres, eso haré

—Inténtalo.

Inosuke se vuelve a colocar la máscara con irritación y a puño limpio intenta golpear al rubio, pero no lo logra, pues Aoi se hace presente y alcanza a jalar del cuello del pelinegro hacia atrás, derribándolo en un movimiento. Esto provoca que Inosuke se enfade y retire nuevamente su máscara para divisar a quién hizo tal movimiento.

—¡Tanjiro me ha pedido que les ayude a su entrenamiento y ustedes parece que sólo sirven para hacer desastre, par de idiotas! —los observa enfadada.

—Lo siento, Inosuke y yo sólo tuvimos...

—Una conversación, pero ya llegó a su fin —interviene el de ojos verdes mirando al rubio con enfado.

—Sí —bufa.

—Sólo esperemos a que regrese Tanjiro. No hagan cosas imprudentes —masculla la pelinegra mirando a Inosuke.

—¡Llegue! ¿Me perdí de algo? —sonriente se acerca el pelirrojo.

_______

La noche cayó para los espadachines. Ya se encuentran apunto de dormir, cada uno en su respectiva habitación después de que Inosuke hizo un drama por tener su privacidad.

—Parece que Nezuko no despertó hoy —se dice Zenitsu a sí mismo.

El rubio sale de darse un baño, manteniendo en sus manos una toalla con la cual se está secando el cabello, trae puesta su ropa de dormir y está descalzo para evitar hacer ruido con sus pasos.

Entra a su habitación y se recuesta para de una vez dormir. Cerrando los ojos poco a poco estaba logrando conciliar el sueño, pero no puede dormir pensando en ella todo el tiempo.

—¿Qué me está pasando? ¡No me la puedo sacar de la cabeza! —lleva sus manos a su rostro con frustración.

Un tenue golpe en su puerta lo saca de sus pensamientos, extrañado lo piensa un poco, pero al final se levanta para abrir.

Es demasiado tarde, ¿por qué alguien viene a esta hora?

Quién estaba frente a suyo era quien menos esperaba.

—Nezuko...

Rápidamente la chica entra abrazándolo con fuerza, Zenitsu queda perplejo ante el acto, pero procede a cerrar la puerta con intenciones inocentes. Teme porque los vean.

Finalmente corresponde el abrazo. Tenerla entre sus brazos es lindo, su altura es tierna. Ella con premura lo empuja un poco, haciendo que de pasos atrás. Agatsuma la intenta soltar pero al final cae sobre la cama.

—¡¿Q-qué pasa, Nezuko?!

Ella se queda callada y se acerca a él.

—¿T-tanjiro está despierto...?

La joven niega con la cabeza y mira al chico que igualmente la está observando fijamente. Sus respiraciones chocan la una con la otra en sus rostros y forma en la que Nezuko lo tiene es perfecta. Algo sumamente tentador.

—¿Por qué haces esto? —murmura.

Las manos de Nezuko le rodean el cuello y su cuerpo de doblega sobre el de él. Zenitsu parece perder la cordura poco a poco, siente la presión del cuerpo de la joven contra el suyo y los mantras de pecado no le dejan de rondar por la cabeza. 

—¡¿Acaso no te das cuenta, Nezuko?! ¡Me gustas! ¡Me gustas mucho!

Los ojos del espadachín tienen un sobrecogedor brillo, exigiendo ser observados por ella. La Kamado se retira el bambú de los labios y pega su frente sobre la de él. Sus orbes rosados se fijan en los suyos y con cariño le pasa una mano por la mejilla.

Esta debería ser una hermosa noche para consolidarse.








¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Después Del Crepúsculo [ZeniNezu] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora