💥HAIL HYDRA💥

CAP 8 CONOCIDOS

-Se honesta conmigo, Picolina o no volveré a salvarte el trasero dentro de la Red Room... -Natalia fue muy contundente cuando acorraló a la pequeña rubia entre los vestidores mientras ella se ajustaba el arma a sus mulos.

-Ya te dije que no sé de que me hablas, Ali. -Polina mostró unos ojos confusos que no convencieron para nada a la rusa.

-De acuerdo... Pensé que éramos hermanas, pero creo que me equivoqué contigo. -La pelirroja la miró con verdadera decepción, colocó su arma dentro de su enfundadura al costado de su pierna y giró para enfilarse, pronto debían entrar a la simulación del día..

-Somos hermanas, Rooskaya... Te lo contaré todo, pero no te enfades conmigo. -La pequeña rubia corrió hasta atravesarse en su camino e impedirle el paso.

-Lo haces solo para que te cubra el trasero ahí adentro ¿cierto? -Ella se cruzó de brazos con indignación.

-No, lo hago porque te quiero, y eres la única familia que tengo aquí, bueno tú y las otras... -Polina puso ojos de cachorrito arrepentido.

-Bien, me dirás quién y porque... Ahora andando, presiento que hoy no será nuestro mejor día. Padre ha estado vigilándonos, pronto tendrás que ver por ti dentro de las simulaciones, debemos mejorar tu puntería. -Le susurró con preocupación.

-Trabajo en ello, se que no sobreviviré a la prueba final Natalia, ya me resigné a eso. -La rubia se encogió de hombros con fingida indiferencia.

-No, verás que no será así. -Alianovna la animó, apretó su mano y salieron finalmente, lista para el último infierno del día.

La simulación no fue diferente a los enfrentamientos de los días anteriores. La sala las había transportado a una vieja base abandonada de la KGB en Suiza en donde debían escabullirse entre escombros y pasillos colápsados de un viejo sótano para llegar a la sala de mando y extraer información, debían eliminar a todos a su paso y salir con vida de ahí. Natalia y Polina últimamente terminaban trabajando en equipo cubriendo la espalda de la otra a toda costa, lo que definitivamente no iba con la filosofía personal de Dreykov y que además lo hacía enfurecer y maldecir el corazón blando de su mejor futura espía. La rusa debía aprender a la mala que dentro de la organización no había cabida a sentimentalismos ni hermandades ridículas.

El tiempo se terminaba, así que Natalia salió detrás de una enorme máquina destruida que estaba haciendo corto circuito para embestir a Viktoria y tumbarla en un solo movimiento, enroscando sus piernas al rededor su cuello para azotarla contra el piso y disparar a quema ropa directo a su sien eliminándola en automático para así permitirle a Polina salir de su escondite y bajar hasta la sala de mando. La rusa intentó seguir a la pequeña rubia, pero justo en el instante en el que trató de ser una distracción, Irina y Yelena le dispararon en el pecho al mismo tiempo, eliminándola a los pocos segundos.

-Está fuera de nuevo... -Barnes susurró mientras observaba su pantalla iluminarse de rojo, seguida de la rubia de 15 años quien recibió dos disparos precisos en el corazón.

-Yelena lleva dos semanas siendo la única en llegar viva hasta el final de la simulación. -Rogers observó las luces de la sala encenderse y a Dreykov maldecir furioso, tenía el ligero presentimiento que algo desagradable sucedería.

-¡Esto es una maldita porquería! -Dreykov lanzó su trago sobre la pantalla roja de Alianovna, causando que los vidrios estallaran en mis pedazos y que algunas chispas eléctricas salieran del aparato.

Las mujeres salieron adolorida una vez más de ahí y se dirigieron nuevamente al laboratorio en dónde esta vez tomarían una muestra de su sangre y les aplicarían un par de vacunas como protocolo.