Capitulo 15

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Habían pasado cuatro días desde que habiamos llegado a la casa de campo. Después de aquella escena en el despacho no volvimos a hablar del tema de "Ciara y Víctor" lo cuál agradecía por completo. Mis padres parecían más enamorados que nunca y junto con Thunder parecían aún más unidos de lo que ya eran. Habían decidido "olvidar" el asunto mientras estuviéramos todos en aquella casa de campo. Quizás después el tema saliera a flote nuevamente. Sentía que faltaban cosas por resolver. Si deseaba cerrar ese "ciclo" pero habían muchas cosas las cuales me hacian dudar. No me refería a Víctor, él había sido sincero. Era todo con Ciara. Había algo más que tenía que averiguar.

Ella y Alexander parecían estar bien. Disfrutaban la compañía del uno y del otro completamente a gusto. Alex era todo un amor con ella y la cuidada mucho por el embarazo. Y ella parecía ver olvidado el beso que había pasado entre ella y Víctor. Intenté hablar con ella sobre eso después y solo me dijo "No significó nada" Para serles sincera no la ví muy convencida de sus palabras. La conocía como la palma de mí mano y sabía que para ella había sido más que un arranque. En estos días pude notar como ella desde la distancia miraba a Víctor y a mí padre juntos. Estaba segura que ella sentía algo más pero sabía que no había nada que hacer. No todo es como uno desea.

Y bueno, Omar y yo. Disfrutabamos juntos ir al bosque, podíamos estar solos sin tener la mirada de todos en nosotros. Aunque debo de aclarar que no habíamos tenido nada de sexo. Me sentía un poco desesperada la verdad. Desde aquella vez en el auto no pasaba nada. Solo unos besos y unos leves roces. Sentía que me lo estaba haciendo aproposito y comencé a sospechar que aquel "castigo" había comenzado de esta manera. ¡Será cabrón! Muy mal plan de su parte. Aunque habían ocasiones que se le iba la mano con los roces y besos apunto de desnudarnos frente de quién fuera y coger como dos locos desesperados pero se retenía y se alejaba con una muy notable erección en sus pantalones y una sonrisa maliciosa. ¡Hijo de perra! Me más pagará.

Hoy me había levantado temprano para ir a "correr" a falta de sexo una buena caminata nunca viene mal. Salí camino abajo sin detenerme en un segundo disfrutando del sol de la mañana con mis audifonos encendidos con una canción que apenas la reconocida, "Are You" de Julia Michaels. Regrese después de cómo una hora y me detuve a aspirar el rico aire fresco debajo de un árbol.

— Hola preciosa. – dice aquella voz detrás de mí.

Puse los ojos en blanco. Estos cuatro días no habíamos interactuando mucho. Él ayudaba a su papá en los deberes y apenas me veía la cara. Me gire y me sorprendí al verlo solo en unos jeans ajustados y sin camisa. Sin poder evitarlo le observé con bastante detenimiento. Tenía unos brazos anchos, un abdomen marcado y en su pecho una fina capa de bellos que lo hacían lucir llamativo. ¡No Alina!

— ¿Terminaste? – pregunta divertido y sonriendome bastante coqueto.

— ¿De qué? – volví la vista a sus ojos.

— De comerme con la mirada. ¿Te gustó? – pregunta cruzándose de brazos.

— Te cargas un ego muy grande ¿Sabes? – le empujó pasándole por el lado pero su mano me sujeta del brazo. No puedo evitar reir. Será estúpido.

Y no sé cómo lo hace pero cuando me doy cuenta estoy trepada en su espalda como si estuviera montando a "caballito" creí morir. No sé cómo movía mi cuerpo como si fuera una pluma.

— ¡Qué mierdas! ¿Qué coños contigo Lorenzo Luis? – me quedé sujetándolo de los brazos.

— Tienes una cara de aburrida. A divertirnos. – dice y comienza a correr dentro de aquel bosque.

Sus pisadas eran fuertes y yo más mi sujetaba con miedo a caerme. Sus manos se posaron en mis muslos para sujetarme y siguió corriendo entre risas. No podía creerlo. ¿Qué estaba haciendo el muy desgraciado? No podía ni hablar y el siguio como si mi peso corporal para él no fuera problema. Se detuvo bastante agitado y me bajo. Yo apenas podía mantenerme en pie y me tuve que sujetar de su cadera para no caerme. A él no pareció molestarle y se giró sonriendo. Su pecho subía y bajaba de forma rápida y el sudor le bajaba por la frente y todo su torso.

Junto a Tí (+18) #3 {Tercera parte} Where stories live. Discover now