Junto a Tí (+18) #3 {Tercera parte}

Capitulo 22

Levanto la vista para mirar a través de las gafas de sol que llevo puestas y admiro el maravilloso azul del cielo. Un azul tan brillante que te obliga a imaginar. Suspiro completamente relajada. Omar está a mi lado, acostado en una de las sillas de playa. Esta sin camisa y con unos jeans cortos, esta leyendo un libro. Uno recomendado por mi "Hija de la Fortuna" de Isabel Allende. Jamás pensé que se interesara tanto en la lectura. Esta tan quieto y completamente absorbido por las letras. Se ve más joven sin duda o bueno...tal vez sen mis ojos de enamorada. Las vacaciones le han sentado bien, si lo vieran ahora jugarían que es otra persona.

Son los últimos días de nuestras vacasiones y estamos disfrutando al máximo de este maravilloso sol de la tarde de Puerto Rico. Estamos alojados en un hotel muy cerca de aquí. Me acomodó en la silla de playa y cierro los ojos un momento, justo hasta que mi móvil resuena. Es Alexandra. Sonrío al recordar su reacción al ver a Omar.

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- Omar ella es Alex, Alexandra él es Omar mi novio. - los presento. Omar medio sonríe y Alex lo mira boquiabierta.

- ¿Se te cae la baba? - la voz del esposo de Alexandra detrás de nosotras nos hizo mirarlo. Estaba serio. Dalan era más alto que Omar y la.imagen era muy graciosa.

Alex recuperó la compostura y lo saludó como si fuera una persona más. Yo no podía dejar de reírme.

- Alina ven acá. - me acerqué a ella.

- Tu novio parece un mafioso. - me susurro.

- Algo así me han dicho.

Cuando ambas nos giramos nos dimos cuenta que tanto Dalan como Omar establecían una muy simpática conversación. Las dos nos miramos nuevamente y para nuestra propia sorpresa se llevaron de maravilla. Tanto así que hasta unos tragos se tomaron juntos. Omar cada día me sorprendía más.

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- ¿Estás bien? - me susurra Omar al oído. Me mira de pies a cabeza.

- Si. ¿porqué?

- Tienes la piel roja. Te vas a quemar. - coloca un dedo entremedio de mis senos.

- ¿Será?

- Si te quemas no podremos... - se queda callado y sonríe.

- Deberías de terminar lo que ibas a decir.

- Supongo que ya lo sabes.

Omar Dickson, jamás deja de pensar en sexo. ¡jamás!

- ¿Me pones más crema?

Sonríe y sus ojitos le brillan.

- Encantando. Recuéstate. - habla en voz ronca.

Me recuesto con el pecho tocando la silla y lo veo moverse a ni lado. Se coloca de rodillas y vierte la crema en mi espalda. Sus manos comienzan a moverse de forma lenta, sus dedos fuertes me dan pequeños masajes con ellos por toda la espalda. Mis ojos se cierran por lo placentera que es la situación.

- El Caribe te sienta muy bien. Te ves hermosa. - murmura mientras sus manos bajan hasta mi trasero y lo masajea descaradamente.

- A ti también. - logro decir en voz ronca. Definitivamente le viene muy bien el sol.

- Siéntate. Voy a darte crema en el pecho.

Sonriendo me levanto y me siento frente a él. Tiene una sonrisa despampanante en su hermosa cara ahora un tanto bronceada por el sol. Comienza su labor y se detiene más de la cuenta en el área de mis senos.