No Lo Hare

8 2 0
                                    


Me gustaría ser una roca, ser tan fuerte e inquebrantable como fuera posible, pero no lo soy, y hay días en los que lo único que quiero es tumbarme sobre mis rodillas y llorar sin parar, días en los que desearía simplemente no sentir nada, días en los que quisiera que mis ojos no se cristalizaran, y que el nudo en mi garganta no se hiciera presente para que mi voz no salga entrecortada debido a la falta de aire que es casi imposible de ocultar, pero aun así me niego a derrumbarme, me niego a mostrarme débil ante los demás.

Recuerdo que.....................

Mas o menos un mes antes de salir de la escuela, nos reunimos en la clase de música que sinceramente es la cosa mas aburrida que existe, pero ese día era especial, era diferente, nos preparábamos para la despedida, para decirnos adiós y seguir nuestros caminos en otra dirección, así que el profesor nos dio una manera muy única de hacerlo, teníamos que sentarnos en una silla al frente de toda la clase y escuchar lo que nuestros compañeros pensaban de nosotros, ¿interesante no?, en fin pasaron algunos de mis compañeros y fue algo medianamente emotivo desde mi punto de vista , pero llego mi turno y el roll cambio, mi momento de ser juzgada había llegado y no estaba lista para lo que paso después...

Tome asiento al frente de la clase, tenia miedo, todos me observaban y de cierta manera me sentía nerviosa por lo que iba a escuchar, entonces comenzó... pude ver rostros de desinterés, así como de miedo y confusión, al notar que ninguna mano se encontraba en el aire, la incomodidad de mi parte aumento hasta que una de mis hermanas levanto la mano, sabia lo que venia así que era justo el momento para ponerme mi caparazón, pero sus dulces palabras hicieron de ese un ambiente mucho mas acogedor, entonces las 4 continuaron diciendo cosas hermosas de mi con lágrimas en los ojos, algo que me dejaba en un punto algo comprometedor al no dejar que las lágrimas se hicieran presentes en mi rostro, y no es que sus palabras no me conmovieran, solo creo que es algo que ya sabia, algo que tenia muy presente, algo que me habían demostrado muchas veces mas, al terminar de escucharlas hablar creí que era todo, pero una voz en medio del lugar se hizo presente y sin entender muy bien lo que pasaba me dedique a escuchar lo que tenia que decirme y de pronto mi cerebro no lograba procesar lo que pasaba y mi boca se quedaba sin palabras ante las muestras de apreciación hacia mi de personas que ni en un millón de años hubiera imaginado que me veían, entre las palabras que escuche estaban cosas como...

-Te admiro mucho.

- No se como haces todo bien.

- Eres la que nos hace querer ser mejores.

- Eres la que nos humilla con la perfección con la que hace las cosas.

- Eres la niña perfecta.

- Eres inalcanzable, perfeccionista, amable, reservada pero buena persona.

- Eres la que nos mira sin decir nada y sabe que en el futuro seremos hormigas en su mundo.

- Eres nuestra Diosa.

Palabras casi imposibles de creer que salían de quien menos lo espere, no del todo ciertas a mi parecer, pero que sin duda agradecía, que sin duda tendrán un lugar en mi corazón toda mi vida, solo no entendía lo que ellos veían en mi, me dijeron palabras que quería escuchar, elevaron mi autoestima y me hicieron sentir parte de un mundo en el que si existía, un mundo en donde era alguien, un mundo en el que me veían, y aunque no parecía yo jugaba un papel en la historia.

Fue de esos momentos donde solo quieres desaparecer para que no te vean llorar y como no puedes te tragas las lágrimas y finges que estás bien aunque por dentro algo dentro de ti se rompió.

Y así como hay momentos que te hacen querer llorar de felicidad, también hay momentos en los que tus ojos se humedecen por tristeza o coraje como el día que.....los vi.

Era un día normal, supongo que todo había salido bien, me encontraba mirándote pérdidamente hasta que sonó la campana que anunciaba el final del día, así que consiente de que nos quedaba poco tiempo quería aprovechar cada segundo que pudiera verte, así que tome mis cosas y salí de la escuela sin quitarte la mirada de encima, mis amigas se quedaron atrás así que iba prácticamente sola detrás de ti, cuando de pronto te vi ir hacia otra dirección la dirección por la que yo me iba, cruzaste la calle y al otro lado había alguien esperándote, la miraste y le sonreírste, pude notar la felicidad de sus rostros al mirarse, y sentí que mi universo se rompía, entonces como si no fuera suficiente, la tomaste de la mano y regresaste con ella por donde viniste pasando por mi lado y perdiendote con ella entre la multitud.

Por más que el dolor que me causaba verlos era inminente, seguí observando la escena hasta perderlos, como un robot seguí caminando mientras el nudo en mi garganta se aparecía, llegué al transporte abrí la puerta e ignore a todos, las lágrimas estaban apunto de salir y mi corazón hecho pedazos, pero aún así no me permiti a mi misma llorar por ti y sólo no lo hice, la triztesa seguía ahí, se sintió más fuerte que nunca pero aunque algo en mi estaba roto no iba a dejarme caer.

A pesar de que te había visto con muchas chicas haciendo exactamente lo mismo, no me explico porque está vez si me importó, no entiendo porque me dolió tanto, pero en fin luego descubrí que era tu novia, "Celin" un poco mayor que nosotros, obviamente estudiaba en otra escuela y llevaban un tiempo saliendo.

Supongo que el hecho de que mis sentimientos por ti sean más fuertes cada día tiene inconveniencias, entre más me permito amarte, más difícil es no sentir el dolor.

Pero sabes que no me importa lo que hagas, no me verás llorar ni por ti ni por nadie, no lo haré.

Al Final No Somos Nada.....Where stories live. Discover now