Capítulo 6

108 10 16
                                    

Allyson


—Te amo... sin embargo me doy cuenta de que tú ya no lo haces — suspiro sintiéndome cansada — ¿No valió nada todo el tiempo que nos dedicamos?, ¿Por qué quieres abandonar todo?

Él solo me da una mirada triste y siento que ya no puedo aguantar más.

—Oh, cariño... he luchado contra esto tanto como tú. Al principio del verano rechazaste mi mano y ahora que me ves feliz, deseas volver. No puedo aceptarlo.

Las primeras lágrimas caen por mi mejilla y no me molesto en limpiarme.

—Solo, te pedí tiempo para corregir mis errores — agarro sus manos con las mías temblorosas— pero noto que te he perdido, será nuestro adiós— me acerco más a él hasta que nuestras narices se rozan y...

— ¡Tomemos un descanso! — Grita la profesora y ambos nos alejamos — excelente Allyson, he sentido tu dolor — asiento contenta mientras Tracy me da un pañuelo desechable y limpio mis lágrimas — me gusta cuando logran entenderse, porque ahí me felicito por tenerlos como la pareja principal la conexión en escena es maravillosa. Ha sido excelente — da pequeños aplausos.

— ¡Joder!, amo verte actuando Ally — Tray da pequeños saltos a mi alrededor como si fuera una niña pequeña y la miro con algo de diversión. — por un momento pensé que si se besarían y me sentí como asquito por ti.

—A mí también, pero cuando eso llegue a pasar pensare en mi perfecto Chris Evans — me encojo de hombros — además no es tan difícil besar sin sentir nada, solo hay que hacer lo posible para que parezca real.

—Toda una profesional — en realidad sí, hay químicas que solo están en el escenario — ¿Por qué llegaste tarde hoy en la mañana?

—Por culpa de un estúpido — me observa sin entender, es cierto que no sabe de Enzo. No sé si realmente me apetezca hablar de ese tema con ella, soy un poco cerrada con mis cosas personales — tenía que hacer el inventario en el bar del tío Pet y estaba un vagabundo rondando por ahí.

Empieza hablar sobre un proyecto para ayudar a los vagabundos de las calles de Londres y me desconecto por completo pensando en mi pequeño encuentro de esta mañana.

...

El día estaba empezando muy bien, el profesor de mi primera clase cancelo la lección porque su esposa estaba por dar a luz, no es que ese hecho realmente me importara pero fue lo que nos dijo la asistente del rector. Así que decidí ir al bar para hacer el inventario, a fin de mes esa planilla debe estar llenada para que mi tío puede hacer los pedidos correspondientes, lo que no me esperaba era encontrarme con De Luca.

—Oh no, esto tiene que ser una broma de mal gusto — da media vuelta y me observa con algo de diversión, expresa mucho con la mirada— ¿me estas acosando?, porque si es así, no dudare en ir a la policía y poner una denuncia.

—Ya quisieras tú que un chico tan hermoso, espectacular, increíblemente genial y con una sonrisa moja bragas como yo te acosara, sería un honor para ti — habla con total seguridad.

¿Cómo es posible que alguien sea tan narciso?

¿Cómo alguien puede ser tan seguro en esta vida?

— ¿Cómo tú?, ¿honor? — Rio de forma sarcástica— Tengo mejores gustos en chicos — eso es una mentira piadosa.


No elijo bien a mis "prospectos" y por eso deje a un lado todo el protocolo de conocer a una persona e ir a citas desastrosas.

Una Inesperada Melodía - Libro 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora