Imperial (Inazuma Eleven Go - Riccardo Di Rigo)

𝟏𝟒.

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C A P Í T U L O   C A T O R C E:
El beso.
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El partido contra el Alpino había sido bastante duro, pues este era un gran equipo que contaba con una increíble defensa.

Los del Raimon habían practicado muchísimo la supertáctica, sin embargo, no les salió hasta que Lucien entró al campo. Fueron Harper y Lucien los que consiguieron romper la defensa del Alpino, y con un tiro increíble del chico, marcaron gol.

Además de aquel gol, Harper consiguió meter otros dos goles, uno con su supertécnica "Tiro de Hades" y otro combinando esa supertécnica con la de Riccardo, "pentagrama". Por lo que, cuando sonó el pitido final, el marcador quedó 3-2, ganando el Raimon.

Todos estaban eufóricos, y Shawn se acercó a Njord.

—¿Volvemos a jugar al fútbol, Njord? —preguntó Shawn, una vez estaban cara a cara.

—Claro que sí. —dijo este, abrazando a su antiguo entrenador.

—Siento mucho lo que hice aquel día, Njord. —dijo Harper llegando a su lado— Estaba cegada por la farsa en la que vivía. Espero haberte ayudado ahora a despertar. —el chico asintió y le restó importancia. Para él, el pasado, pasado estaba.

Shawn se alejó, yendo hacia Mark e indicándole que se acercara. Ambos se dirigieron a una esquina para dialogar con tranquilidad.

—¿De qué querías hablar? —preguntó Mark. Al oír lo que Shawn soltó, Mark palideció. Debía preguntarle a Harper sí era verdad, y si lo era, debía contárselo a Jude.

[...]

—¿Para qué quería que me esperara? —dijo Harper bajando del autobús y viendo cómo todos se iban sus casas.

—Shawn me ha contado una cosa acerca del Sector V y ese sitio llamado el santuario. —Harper palideció al oír aquel nombre, tal como le había pasado a Mark. Empezó a contarle todo lo que Shawn le había dicho— Entonces, ¿es cierto?¿Shawn tiene razón?

—Para mí desgracia, no puedo contradecir nada de lo que has dicho. El Sector V ha hecho muchas cosas para conseguir su objetivo, y por mal que suene, no se arrepienten. El santuario como bien has dicho... —Harper empezó a contarle todo lo que sabía acerca de ese sitio y lo que sucedía allí dentro.

—Con que es verdad...

—¿Qué piensa hacer, entrenador Evans? —Mark desvío la mirada y Harper lo comprendió al instante— Lleve cuidado, entrenador. —la chica dejó solo al hombre solo y se fue a casa, dudando de si había hecho bien al contarle aquella información. Si le pasaba algo, sería su culpa...

Al rato, en aquel mismo sitio, apareció Jude Sharp.

—Tengo que pedirte un favor, Jude. Voy a dejar el puesto de entrenador del Raimon y necesito que te hagas cargo de ellos por mí. —Jude no daba crédito— Parece que el auténtico objetivo del Sector V va mucho más lejos que controlar el fútbol. Debo ir a investigarlo y tú eres el único al que puedo confiar el Raimon.

—Mark... —susurró Jude.

[...]

—A partir de hoy hay un cambio en el plan de entrenamientos. —ordenó el actual entrenador del Raimon, Jude Sharp.

Flexiones, sentadillas... Aquel entrenamiento era sin balón. Todos estaban sorprendidos ante aquello.

Harper tenía claro que ese entrenamiento era como el de la Royal, y sabía perfectamente que era lo que Jude quería lograr con aquello: aumentar las capacidades físicas y reformas los puntos fuertes de cada jugador.