Imperial (Inazuma Eleven Go - Riccardo Di Rigo)

𝟐𝟑.

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C A P Í T U L O   V E I N T I T R É S:
Dragon Link |Parte Dos|.
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—¡Por fin estamos aquí! Dentro de nada comenzará la final del Torneo Nacional Camino Imperial, donde se enfrentará el instituto Raimon contra el instituto Monte Olimpio para ver quien de los dos es el mejor equipo de secundaria de todo el país. ¡El estadio está completamente lleno de público, increíble! —gritó el comentarista emocionado.

Los ánimos variaban según la persona. Un hombre movía la pierna sin cesar debido a los nervios. Aún no entendía que había llevado a Harper a dejar el equipo y unirse a Cinquedea. Tampoco podía dejar de pensar en lo que estaría tramando.

Por otra parte, un antiguo compañero de equipo de Harper miraba la televisión desde el hospital, preocupado tanto por la chica como por el partido. Estaba enfadado consigo mismo por no poder haber detenido a Harper y haberla hecho entrar en razón y por no poder jugar con su equipo.

Los jugadores del Raimon estaban eufóricos. Por fin se encontraban en aquel increíble estadio y lucharían con todas sus fuerzas. Iban a por todas, iban a ganar. Arion se encontraba más nervioso que el resto, pues debía afrontar esta vez el partido de forma diferente, pues ahora era el capitán. El capitán... que bien sonaba, aunque en cierta forma al pensar en ello le daban escalofríos. ¿Conseguiría hacerlo bien?¿Estaría a la altura?

Finalmente, Harper se encontraba tratando de calmarse en una sala del estadio, junto a los jugadores del Dragon Link. Ella aún no sabía si iban a tener que jugar, pero esperaba que no. Si salían a jugar, debería darlo todo por el bien de sus amigos, y haría que perdiesen todo por lo que tanto habían luchado y se habrían esforzado para nada. No era justo.

—Como sabrán todos ustedes, al mismo tiempo que habrá un apasionante duelo en el fútbol, también habrá elecciones para el puesto de Gran Emperador del Sector Quinto. —informó el comentarista— La imprevista candidatura de Seymour Hillman ha estado subiendo como la espuma. Este partido será decisivo para el puesto de Gran Emperador.

Mientras el estadio estallaba en gritos eufóricos, ambos equipos se encontraban listos para entrar al campo.

—Tú eres el capitán del Raimon, ¿verdad? —cuestionó un chico— Me llamo Cronus Fourseasons, y soy el capitán del Monte Olimpio.

—Arion Sherwood, capitán del Raimon. —dijo este, sacudiendo la mano que Cronus le había ofrecido

—Siempre os hemos considerado como nuestros mayores rivales, espero que tengamos un partido justo y limpio. —dijo con una sonrisa sincera. Arion asintió, sonriéndole de vuelta.

Al llegar al banquillo, Mark habló:

—Equipo, en este partido nos jugamos el futuro del fútbol. Aquí se decidirá si conseguimos recuperar el auténtico fútbol o no. Así que os diré una cosa, ¡jugad como sabéis y divertíos a tope! —sonrió— Tomad el primer puesto de Japón con vuestras manos, provocad un estallido que se oiga por todas partes y tiras con todas las fuerzas. —finalizó.

—Pues... ahora deberías darnos un grito de ánimo, Arion. —soltó Subaru.

—¿Y-yo dices? Esto bueno, en ese caso... —todos pusieron sus manos en el centro y esperaron las palabras de Arion— ¡Vamos a ver si ganamos!