🐈 ⑦ 🐈

150 13 5
                                    

Huí de la casa de aquel chico para empezar a tomar algún rumbo hacia algún lugar. Debía comenzar a recordar las cosas pero no entiendo que me pasó, no puedo recordar nada y hasta puedo decir que sentía como si estuviera volviendo a nacer.

Hace frío en la ciudad y yo caminaba descalza por el pavimento ya que fue lo primero que se me ocurrió cuando salí de su casa. Y lo hice porque siento que alguien me está esperando pero no puedo recordar nada, no sé quién soy ni de dónde vengo.

Me congelaba con cada paso que daba por el simple hecho de que llevo ropa interior y encima una especie de túnica de hechicera transparente, mi miedo creció cuando a lo lejos pude observar como venía un joven solitario que llevaba un hermoso abrigo negro.

Sonaba su tacón en cada paso y yo trataba de caminar más rápido, para que solo tuviéramos un cruce y seguir mi camino.

Pero cruzamos miradas y él se sorprendió un poco por mi vestimenta al igual que yo por la de el. Siento que lo había visto antes o que incluso ya lo conocía.

Él tropezó su hombro con el mío y ambos sonreímos nerviosos.

– Disculpa – Dijo

– No hay problema – Respondí

Nos quedamos mirando un poco más y él tomó mi mano.

– ¿Te conozco de algún lugar? – Me hizo ver hacia la luz para poder mirarme con más claridad

Y para mí sorpresa su reacción fue de asombro junto con un abrazo que me dejaba sin aire.

– ¡Rose!– Me soltó y me acarició el rostro mientras sus ojos botaban lágrimas

– ¿Quien es Rose? – Negué – ¿Quién eres tú?

Él me miró como el otro chico que es muy parecido y yo no sabía que hacer ante esas miradas porque me traían bastante confusión.

– Rose soy Syd... – Tomó mis manos

– Syd... – Repetí pero su nombre no parecía darme ninguna pista.

– Si yo soy Syd... Te estuve buscando por todas partes. Mira esta vez te diré todo – Tomó aire – Viajaste en el tiempo con Syd pero él y tú no llegaron al mismo lugar.

Lo miré extrañada y su rostro me recordaba tanto a alguien... Pero no entiendo nada. ¿Quien es Syd?

Me alejé de ese extraño muchacho y él me estaba siguiendo con rapidez.

– ¡No me sigas! – Voltee

– Rose tenemos que hablar, estás semidesnuda en plena calle y estás descalza – Me cargó

– Suéltame – Le dí golpecitos en la espalda

– No, tú irás conmigo – Comenzó a caminar

– ¡No! – Grité

– Rose por favor, cálmate – Me bajó y me hizo mirarlo

– ¡No! Porque yo no sé quién eres y no tengo que hablar contigo – Quité sus manos de mi cara

– ¿Cómo que no sabes quién soy? Rose yo soy tu novio. – Dijo muy asustado

– ¿Novio? – Lo miré raro

– ¿No me recuerdas? – Me tomó de la cintura

– No – Me solté – Tampoco sé quién soy.

Syd se quedó perplejo y su acción fue cargarme de nuevo para llevarme caminado. Yo estuve gritando por muchas calles pero él seguía caminando sin importarle nada.

𝘽𝙖𝙧𝙧𝙚𝙩𝙩       | 1971©. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora