¡Solo Quería Un Bebé!

SOLO QUERÍA UN BEBÉ. (7)

Cuando la beta se fue, el alfa miro al omega.-¿Piensas ir hoy a la clínica?-

-claro que si. Necesito ese medicamento lo antes posible, debo alimentarme correctamente para que mi bebé se desarrolle bien.-

Demián observó la sonrisa del Omega, ¿Era tan grande su miedo a la soledad que no le importaba desperdiciar su vida al embarazarse a tan temprana edad?

La cortina se removió dando paso a los tres alfas que siempre cuidaban del castaño.

-hola.-saludó el alfa peliazul, Diego.-¿Cómo estás?-

-un poco mejor. ¿Cómo sabían que estaba aquí?-

-fui a buscarte cuando tu clase de artes terminó, no te ví y le pregunté a tu amigo por tí, me dijo que te habías desmayado y te habían traído aquí.-

-¿Que te dijo la enfermera?-cuestionó el albino de ojos rojos, Ian.

-nada grave, solo necesito comer adecuadamente.-

-eso no es sorpresa ni secreto, ya sabemos que estás en cinta y debes cuidarte el doble.-el Omega dibujo una sonrisa ante el comentario del rubio, Jack.

El alfa pura sangre miraba como los adolescentes platicaban con armonía, al saber que ese no era su ambiente ni su plática salió de la enfermería.

♪♪♪

Taylor miraba atento la fotografía que su médico tenía sobre su escritorio, era un retrato en donde estaba su médico junto a su familia. Algún día no muy lejano también tendría una foto suya con su pequeño cachorro.

La puerta se abrió y su médico beta entró y se sentó frente a él.-muy bien Taylor. ¿Sobre qué querías hablar?-

-hoy me desmayé en el colegio, la enfermera escolar literalmente dice que es porque mi Omega interior intenta buscar al padre de mi cachorro. Dijo que no podré comer ni beber algo que no me cociné él.-de su mochila sacó la pequeña hoja en dónde le chica le había anotado el nombre del medicamento que debía tomar. -dijo que este medicamento me puede ayudar, pero que debía consultarlo con usted para saber si era adecuado ingerirlo.-

El beta leyó el papel y asintió.-puedes tomarlo. No afecta en nada al embarazo, al contrario, sirve como ácido fólico y contiene vitaminas muy buenas para evitar otros síntomas o problemas como la preeclampsia.-

-entiendo.-

El beta le entrego un sobre amarillo.-aquí están los análisis de la última vez, nada salió mal, si te cuidas y sigues los cuidados y precauciones tendrás un embarazo sin complicaciones. Pero antes debo decirte unas cosas. Si durante el embarazo llegas a tener una pareja sentimental no debes dejar que te reclamé, si no es el padre del cachorro quien te reclama puede afectar el embarazo, si eso sucede puedes llegar a tener un aborto o anomalías como alguna discapacidad en el bebé. Se cuidadoso.-

♪♪♪

Al llegar a su casa lo primero que hizo fue subir a su habitación y ocultar el medicamento en uno de sus muebles, por el momento ninguna personas que habitaba la casa sabía de su embarazo, no quería que su abuelo se enterase de su "locura", no cuando sabía que su abuelo estaba por morir y no conocería a su bisnieto. No deseaba ilusionarlo.

Un suave golpe se escuchó al otro lado de la puerta.-adelante.-la puerta se abrió dejando ver al mayordomo familiar.-hola Saúl.-

-buenas tardes joven. Su abuelo desea verlo.-

-muy bien, gracias.-el Omega salió de la habitación y comenzó a caminar junto al mayordomo.-¿Cómo se ha sentido? ¿Notas algunas mejoras?-

-el señor Francisco dice que se siente bien, pero no se notan las mejoras.-

Llegaron a la habitación de la cabeza de la familia, Taylor tocó con suavidad y abrió un poco la puerta.-¿Puedo pasar?-

-claro que si. ¿Cómo te fue en el colegio?-

El castaño entró cerrando la puerta tras él.-de maravilla. Me hicieron un exámen la clase pasada, saque 10.-

-ese es mi nieto. ¿Y el novio como va?-

-para con eso. Sabes que odio las relaciones amorosas.-

-algún día llegará alguien que te haga cambiar de opinión.-

-lo dudo mucho. Pero mejor hablemos de otra cosa.-

Aquella tarde ambos se quedaron platicando, el Omega sostenía la mano del mayor con suavidad, estaba cada vez estaba más fría, más delgada, señal de que su vida estaba por terminar.

La puerta se abrió tras sonar unos pequeños golpes.-joven Taylor, lo buscan dos personas, el joven Jack y su hermano.-

-muchas gracias, déjalos pasar.-ciertamente se le hizo un poco extraño, de Jack no era raro, al comienzo de su amistad el rubio casi no salía de su casa, pero le parecía extraño por parte de su maestro.

-¿Jack? ¿Aquel muchachito que adoro pintarse el cabello?-

-jaja no se lo pinta abuelo, es natural.-

-no quieras engañarme, nadie puede nacer con un rubio tan llamativo.-

-lo que pasa es que es vanidoso y trata de cuidar su cabellera.-

A la habitación ingresaron ambos alfas, uno con una enorme sonrisa, el otro con su semblante serio.

-buenas tardes.-saludó Jack acercándose y besando la mejilla del castaño, se separó y acercó a la cama dónde el anciano descansaba.-hola señor Francisco, le traje sus dulces favoritos y las galletas de crema que tanto le gusta.-

La cara del mayor cambio por completo, casi como la de un niño recibiendo el regalo que tanto había anhelado.-gracias Jack, eres un encanto.-

-como cambia la gente.-habló Taylor con voz dulce.-hace unos segundos lo criticabas por su cabello.-

El rubio y el anciano sonrieron, Jack ya sabía que el anciano se burlaba de su cabello, no le molestaba, al contrario, le gustaba ver que el anciano tenía energía para criticarlo.

-hijo, no seas descortés con las visitas, prepara un poco de café.-

-yo te ayudo.-el rubio dejo sobre la cama todo lo que había llevado, al darse la vuelta, Taylor inclinó la cabeza ante el alfa azabache que lo miraba.

-hola.-le saludo el anciano cuando los amigos salieron de la habitación.-a tí nunca te había visto por aquí, ¿Eres un nuevo amigo de mi nieto?-

El alfa relajo su rostro, trato de no verse intimidante en una casa ajena.-soy hermano de Jack y maestro de Taylor.-

-ya veo. Tienes un aura interesante, siéntate cerca, tengo el presentimiento de que podemos entablar una conversación interesante.-

♪♪♪

Mientras el agua se calentaba, el alfa se estiró para poder bajar unas tazas de porcelana importada.

-¿Por qué vino el profesor?-

-ni yo lo sé con exactitud. Le dije a mis padres que vendría a visitarte porque me había quedado preocupado, Demián se me pego y aquí estamos.-

-a decir verdad me siento un poco incómodo.-

-solo ignóralo.-

Después de preparar el café, y una taza de té para su abuelo, ambos subieron a la habitación, al abrir la puerta ambos se sorprendieron, el alfa estaba riendo ampliamente mientras el anciano hablaba de quién sabe que tema.

Ante tal escena pareciera como si el alfa fuera la persona más bondadosa y amorosa del mundo.

>>>