¡Solo Quería Un Bebé!

SOLO QUERÍA UN BEBÉ. (27)

Demián estaba cansado, solamente quería llegar a dormir, estas fechas eran sin duda las peores.

Al abrir la puerta de su habitación, aquella beta pelinaranja salto para poderlo abrazar.-¡Demi!-

-¿Paola?-el alfa intento alejarla, no estaba de humor para lidiar con el dolor de cabeza andante.-es tarde, deberías irte a casa.-

-quería pasar tiempo contigo.-

-ahora solo quiero dormir.-

La chica frunció el ceño al no recibir atención, se sentó en el borde de la cama y decidió comenzar con su absurda "investigación".

-oye, encontré esto tirado. ¿Quien es? ¿Un alumno?-el alfa volteo dándose cuenta que la chica tenía la foto de Taylor.

Se acercó y se la arrebató rápidamente.-agarra tus cosas, te llevaré a casa.-

-también encontré un ultrasonido y una nota.-Demián se congeló.-sinceramente dudo que ese bebé sea tuyo, digo, odias a los omegas, jamás te involucrarias con uno. Yo digo que ese chico solamente buscar atarte a él.-

-si no sabes nada no hables.-la beta se estremeció al ver al alfa, tal parecía que un aura amenazante lo rodeaba, seguramente asustaría a cualquier Omega.

-Demián.-

-vete. Necesito dormir.-

La chica salió de esa habitación con un extraño sentimiento, nunca antes se había asustado con un alfa.

♪♪♪

Liam miraba con suma atención al ruso, le encantaba su piel blanca, su musculoso cuerpo, su gruesa voz... Simplemente no podía dejar de mirarlo.

Taylor noto aquella mirada que su amigo le dirigía al ruso.-es increíble que en todo este tiempo aún no tengan sexo.-

El pelirrojo soltó un suspiro y abrazo una almohada mientras intentaba ocultar su vergüenza.-él se niega, dice que no desea lastimarme. ¡¿Pero lastimarme como?! Es decir, somos novios, estamos por casarnos.-

-tal vez sea otra cosa.-

-¿Cómo alguien más?-

-¡No me refiero a eso! Lo que no quiero es que te sientas inseguro en tu relación con Connor.-

-tal vez no me desea.-

-Liam, eso no...-

-claro que es eso. Vivimos juntos pero aún así evita mirarme cuando salgo de bañarme y solamente uso una de sus camisetas, al dormir prefiere darme la espalda, nunca se ha querido bañar conmigo, a veces intento provocarlo pero... Ah... No creo que está relación vaya por buen camino.-

Taylor sintió un dolor en el pecho, odiaba ver a su amigo tan inseguro y sin felicidad.

-no quisiera interrumpir.-el ruso llegó dirigiendo su suave mirada a su Omega pelirrojo.-pero es tarde, debemos irnos.-

Liam se levantó sin decir nada, solamente observó al castaño y se inclino para darle un beso en la mejilla.-avísame si necesitas algo.-

-vayan con cuidado.-

-hasta mañana.-se despidió el ruso.

-descansen.-

♪♪♪

La televisión no lograba captar su atención, las imágenes y sonido solamente lograban entristecerlo más.

Su prometido estaba en el cuarto de lavado encargándose de la ropa sucia, se sentía solo, se sentía olvidado, como si al viajar a Londres el ruso hubiera cambiado por completo, ya lo trataba como antes, si era cariñoso, pero al mismo tiempo era distante.

-¿Liam?-el Omega levantó la mirada un poco desconcertado.-¿Estás bien?-

-si. No pasa nada.-

El ruso se sentó a su lado sin apartar la mirada del pelirrojo.-Taylor me mandó un mensaje, dijo que no estabas bien.-

-no es nada importante.-

-todo lo que tenga que ver contigo es importante.-

Y ahí estaba de nuevo, primero siendo amable para después alejarse.

-¿Aún me quieres?-

-claro que si.-

Liam abrazo la almohada del sillón y trato de no mirar al ruso.-desde que viajamos a Londres no me tratas como antes. Ya casi no me miras, rara vez me besas... Ni siquiera hemos tenido intimidad. Empiezo a creer que no soy suficiente para ti.-

-vaya que eres tonto.-los fuertes brazos del alfa envolvieron al Omega y lo acercó contra su pecho.-antes podía abrazarte y besarte porque sabía que tus padres estaban cerca, ellos eran la barrera que lograba mantenerme firme, eran los que lograban mantenerme en mi límite.-

-pero no deseo que existan límites.-

-¿Entonces que quieres?-el ruso comenzó a besarle el cuello y a acariciar su cuerpo por debajo de la camiseta que llevaba.

-¡Ah!-la mano ajena bajo hasta su ya erecto miembro. El alfa se sorprendió y dibujo una enorme sonrisa.

-¡Vaya! ¿Cuánto te has estado conteniendo?-

-ca~cállate.-

Connor sonrió gustoso. Se levantó y entre sus brazos cargo el cuerpo del pelirrojo, comenzó a caminar dirigiéndose a la habitación.-bien. Vayamos a la cama.-

-¡E~espera!-

Connor llegó a la habitación y dejó al Omega sobre la cama.

-no me la quieras cambiar.-se quitó la camisa frente al Omega sonrojado, quien solamente le miraba con atención, amaba el cuerpo de ese ruso tierno.-dijiste que nunca habíamos tenido intimidad y que no querías límites, así que cruzaremos esa línea.-

Con rapidez, el alfa le quitó la ropa al Omega. Sujeto sus piernas y las subió a sus hombros mientras comenzaba a lamer y succionar el miembro ajeno.

Liam se estremecía y solamente apretaba las sábanas ante tal satisfacción que lograba sentir, pues anhelaba ser tocado por ese hombre.

-espera, Connor... Ah... ¿Tienes condones?-

-los tengo. Tres cajas completas.-

-¡Ah!-los largos dedos del alfa invadieron el cuerpo del Omega, quién soltó gemidos fuertes cuando el ruso tocó su punto dulce.

-¿Te gusta aquí?-el alfa estaba cautivado, ese Omega era bellísimo, y su voz era aún más erótica en ese momento.

El dolor en su entrepierna era muy incómodo, así que decidió masturbarse mientras tocaba al Omega, quien cada vez parecía más perdido en el placer.

-Connor.... Dentro... Ya no aguanto... Te deseo.-el alfa retiró sus dedos, se puso de pie y de inmediato fue por los preservativos, mientras se acercaba a la cama comenzó a abrir ese pequeño paquete plateado.

-¿Lo has hecho antes?-

-no... ¡Rápido! ¡Te necesito!-

Connor se colocó el condón, estaba nervioso, también era su primera vez, pero quería mostrarse seguro para no asustar al Omega.

Con suavidad comenzó a introducirse en aquel Omega, quien se tensaba al ser invadido por aquel ruso.

Connor contuvo el aliento, estaba nervioso y deseoso, mil veces había evitado mirar a ese Omega porque no quería lanzarsele y lastimarlo, pero ahora comprendía que ese Omega también ansiaba tocarlo y unirse.

Sus primeros movimientos fueron suaves y un poco lentos, Liam rodeo aquella cintura con sus piernas mientras movía por si solo su cadera.

-más rápido... Te quiero sentir.-

-¡Tks!-Connor comenzó a moverse con más fuerza, aquel interior era suave y caliente, podría volverse loco.

Pero lo noche iba empezando.

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