Sistema Mortal, El Más Letal (Novela)

Capítulo 2: ¿Para qué eres útil?

Le hice señas al tendero para que me ayudara a empacar y a salir, y al mirar atrás, encontré a esa persona mirándome con los ojos abiertos, claros y llenos de contraste.

Así que resulta que no estaba durmiendo.

Yexing tenía un conjunto de trámites de registro, que eran bastante molestos, y tuvo que ser confirmado conmigo en numerosas ocasiones. Después de manejar este trámite, saludé a esa persona:

—Vámonos.

Las expresiones de todos los que me rodeaban parecían bastante sorprendidas, y alguien murmuró: —Está tan gravemente herido, y ha estado tumbado durante tantos días, ¿Cómo puede marcharse cuando se le dice que lo haga? Realmente se ha encontrado con un maestro tan despiadado como el anterior......

Esa persona se apoyó en la pared y se levantó tambaleante, acercándose más a mí, teniendo aún más dificultades para caminar que yo. Mientras él tomaba un descanso cada dos pasos, yo esperaba muy pacientemente mientras me sostenía las mangas.

Se necesitó el tiempo de una varita de incienso para salir de la posada.

Se necesitó otra taza de té para pasar por la tienda de bocadillos Shaxian.

Y tomó otro cuarto de hora para caminar hasta la entrada de la ciudad.

Incluso mi muy lento temperamento se sintió un poco molesto.

Yo: —¿No puedes caminar más rápido?

El cuerpo del Guardia de la Sombra se estremeció, y temblaba mientras se arrodillaba: —Este sirviente.... es incompetente.... Maestro, por favor castígueme como desee.

Su voz era ronca, y cada palabra parecía ser difícil de decir.

¡¿Podría ser?! De repente, una idea pasó por mi cabeza y me sentí muy astuto cuando pregunté: —¿Sientes dolor?

—No me atrevo. —El Guardia de la Sombra respiró hondo.

—Entonces vamos. —Supongo que me equivoqué.... me froté la nariz avergonzado, y luego vi que le llevó mucho, pero mucho tiempo levantarse y seguir caminando.

Después de dar dos pasos más como un caracol, me detuve.

En realidad, no tenía ni idea de adónde debería ir y qué camino era el adecuado.

La carta sólo hablaba de la necesidad de comprar un Guardia de la Sombra, y como ya había comprado uno, sentí que todos mis objetivos en la vida se habían cumplido, y que no tenía ninguna preocupación.

Mientras meditaba sobre esto, me toqué el abdomen, y la sensación de dolor me hizo fruncir el ceño.

—Maestro.... ¿No te sientes bien? —El Guardia de la Sombra percibió con agudeza que algo estaba mal.

—He sido víctima de una conspiración, y no me queda mucho tiempo de vida. —Suspiré en frustración.

El Guardia de la Sombra se sorprendió, y dijo en voz baja: —Este sirviente ha cometido una ofensa. —-Así, tomó mi mano.

Hey, ¿Por qué un hombre adulto está palpando mi mano?

El Guardia de la Sombra me sostuvo la muñeca y se quedó inmóvil un rato, luego inclinó la cabeza y dijo: —Este sirviente es incompetente...... no puedo detectar la enfermedad del Maestro.

No te culpo, este lugar es realmente demasiado siniestro.

Le di al Guardia de la Sombra una mirada llena de esperanza, esperando que él guiara la dirección de mi vida. El Guardia de la Sombra estaba desconcertado por mi mirada y no habló por un largo rato.