Los Universos de Percy

Capitulo uno

Pov de Narrador

Era el solsticio de invierno y en el Olimpo todo era un caos, Zeus, Poseidón y Hades discutían sobre quien de sus hijos es el más poderoso. Sus esposas conversaban diciendo porque sus esposos son tan inmaduros para tener esas peleas, por otra parte Atenea y Afrodita peleaban por saber quién es la más hermosa entre las diosas. Por otra parte Ares y Dionisio conversaban sobre vinos y guerras importantes y al final Hefesto junto con Hermes y Apolo armaban un plan para hacer bromas junto con el ingenio del dios herrero. Las únicas que no peleaban eran Artemisa, Deméter y su tía/hermana Hestia, ellas estaban preocupadas porque todas estas peleas hacían que los olimpos no sean una familia unida con amor y felicidad.

Sin previo aviso la sala del trono se llenó de una luz cegadora blanca, al a cuál los 12 grandes cerraron los ojos, al finalizar Zeus dijo en tono enojado

- Quien osa intervenir en una reunión del Olimpo 

Ante tal declaración unas tres voces se escuchan con una ira muy grande:

- Zeus no seas un hipócrita, estamos aquí porque nuestra querida abuela nos dio la noble tarea de entregar estas cintas a los olímpicos para que vean las vidas alternas de su más grande héroe, Perseo Jackson.

Al terminar de hablar todos los dioses estaban atónitos como el gran caos conoce a Percy Jackson un semidios que si peleo contra su padre/abuelo pero no era tan importante.... O sí?

- También queremos que sepan que algunos mestizos vendrán de diferentes épocas del tiempo para ver estas cintas por lo cual deben jurar por el estigio que no los harán daña, está claro?

- Claro que si mis señoras, Yo Zeus rey y representante de los olímpicos juramos por el río estigio no hacer ningún daño a los invitados que tengamos.

Al finalizar el juramento se escuchó un rayo por lo que el juramento esta activo

- Muy bien Zeus eso espero que pase o si no tendrás un problema con nosotras y con Caos

Solo con esas palabras el rey de los dioses empezó a sudar como nunca, después de esta pequeña y hermosa amenaza de las destino la sala del trono se llenó de una luz muy potente que segó, otra vez, a los dioses revelando junto con ella a los dos campamentos, Mestizo y Júpiter, a las amazonas y a las cazadoras de artemisa.