Mi Mate y Yo

Capítulo 4 "En busca de una oportunidad" Parte 2

Narra Damien

Después de contarle la verdad a Elena, ella intentó convencerme de contarle la verdad a Jayden.

Pero me negué rotundamente no podía romper mi promesa hacia Meredith, le diré la verdad a Jayden pero sólo cuando sea necesario. Y así sería.

Pero lo más importante ahora es proteger a mi Luna y a mi cachorro, y para eso ellos vivirán conmigo.

Me dará la oportunidad de ganarme la confianza de mi Luna y su corazón, pero sobretodo protegerla a ella y a Mateo.

No sé quién se atrevió a entrar en la casa de Elena pero... tengo una clara idea de quién pudo ser. Pero no voy a precipitarme.

Primero debo poner a salvo a mi Luna y a mi cachorro.

Estando ellos en mi casa me siento más tranquilo y sobretodo aliviado. Porque así estaré al pendiente de todo lo que ocurre dentro y fuera de la casa.

-Elena... tienes razón pero... no voy a decirle la verdad a menos de que sea necesario y créeme que así lo haré.

-Damien... sólo te digo que entre más tiempo pase será peor el resultado.-

Asentí estando de acuerdo.

-Dejemos de lado el tema por el momento ¿de acuerdo?-Rodó los ojos y asintió de mala gana.

-Primero que nada... tú y Mateo no pueden salir de esta casa sin protección y... antes de que protestes, ten en cuenta que no te voy a dar el gusto de hacer lo que quieras recuerda que están en peligro, ¿De acuerdo?

-Está bien... pero... que quede claro que lo estoy haciendo por nuestro hijo.-Me señaló con el dedo.

-Te ves hermosa hasta cuando te enojas.-Bufó.

Se retiró de la habitación y fui tras ella pero antes le pedí a una de servicio que cuidara a Mateo.

Salimos al patio trasero y tomé del brazo a Elena y atraje hacia a mí.

Intentó soltarse pero no lo logró en absoluto. No lo resistí más le robé un beso lleno de desesperación y deseo.

Quiso interrumpir el beso pero la apreté más a mí y terminó correspondiéndome.

Luego de unos minutos nos separamos por la falta de oxígeno, cuando estaba a punto de darle otro beso, pero en cambio recibí una bofetada.

Que hizo que saliera volando al suelo por lo menos a 3 metros de la casa y tuve suerte porque Elena, es capaz de abofetearme todavía más fuerte y sobretodo más lejos.

-¡Damien White! ¡Te di una última oportunidad! ¡No hagas que me arrepienta!-

Se dio la vuelta.

Comenzó a llover y ella se metió en la casa y yo me quedé afuera mojándome.

-¡Elena! ¡Lo sé fui un idiota! ¡El más grande si tú quieres! ¡Pero...! ¡Sólo con tú ausencia aprendí acerca del error que cometí y créeme que no me va alcanzar la vida para pedirte perdón! ¡¿Escuchaste?!-

Me quedé ahí unos minutos y después entré a la casa completamente empapado. Elena estaba sentada en la sala de estar mirando hacia la nada ignorando mi presencia.

Subí las escaleras y fui a mi habitación a darme una ducha y ponerme ropa seca.

Después de ducharme, me puse una pijama simple de invierno.

Salí de mi habitación y bajé las escaleras, fui hasta la cocina por un vaso de agua pero antes de entrar a la cocina, vi a Elena sentada todavía en la sala de estar mirando hacia la nada.