Capítulo 5 "Aceptando la realidad" (EDITADO)

5.9K 244 6
                                    

Siguió besándome y no pude detenerlo era tanto mi deseo de volver a sentir sus labios sobre los míos que durante mucho tiempo estuvieron deseosos de volver a besarlos.

Nos separamos por la falta de oxígeno, al recuperar el aliento dije:

-Damien... a pesar de que te amo... no... no puedo estar del todo segura de que esta vez no volverás a hacerme lo mismo, porque ya te he perdonado muchas veces e incluso te acabo de dar una última oportunidad, y no porque seas el Padre de nuestro cachorro eso signifique que... eso te de ventaja y lo digo enserio.

-Lo sé y lo entiendo, no te preocupes no tomaré ventaja de ello... pero no puedes negar lo que sientes por mí al igual que yo no puedo negar lo que siento por ti.-

Él tenía razón era cierto, todo absolutamente todo era cierto no podía mentir otra vez... sigo amándolo con todas y cada una de mis fuerzas. No puedo negarlo más, ya no.

Pero mi parte racional me decía que no lo perdonara y mi corazón me decía que no lo dejara ir, después de tanto tiempo peleando y negando mis sentimientos hacia Damien, finalmente puedo decir que lo amo.

Estaba por irme de la habitación cuando Damien me tomó del brazo y me acercó con determinación a su pecho, me miró a los ojos y dijo:-Dime la verdad... ¿Me amas?-

No supe qué decir en ese momento más que...

-Sí...

-Con todas y cada una de mis fuerzas, ¡¿De acuerdo?! ¡Lo admito! ¡Te amo! ¡¿Feliz?!

-Si...- Me tomó de la cintura.-Ahora... ¿En qué estábamos?-

Mi Lobo se ríe, mientras acerco sus labios a los míos para besarlos... cuando escuchamos un grito desgarrador era Mateo.

Nos separamos y subimos las escaleras corriendo directamente la habitación del bebé, al llegar vimos a alguien cargándolo no pudimos verle la cara ya que la tenía cubierta con una capucha negra y miraba hacia abajo.

-¡Suelta a mi hijo!-Gritó Damien.

Aquella persona solo dio un respingo y dejó a Mateo en su cuna, antes de irse dijo:-Volveré por ti Elena...-

Después de decir eso se fue por la ventana y desapareció sin dejar rastro alguno. La sangre se me heló enseguida porque conocía aquella voz, no había duda de ello.

Me quedé paralizada no sabía qué hacer, solo fui directamente hacia mi hijo, lo tomé en brazos y lo abracé con todas mis fuerzas sin lastimarlo.

-Elena... ¿Conoces al tipo?- Asentí llorando.

-Es... mi... Mate...-

Miré como Damien pasaba de estar enojado a estar furioso, lo entendía por ese lado, era comprensible que se pusiera así.

-¿Qué pasó entre ustedes dos?-Me preguntó conteniendo su ira.

Dejé a Mateo en su cuna, miré a Damien y dije:-Vamos a hablar a otro lado no quiero que Mateo se altere otra vez, ¿De acuerdo?-Asintió.

Salimos de la habitación y nos dirigimos al despacho.

-Bien, habla-

Respiré profundo y dije:-Damien... esa persona que entró en la casa es... el Alpha... Sebastian de la Manada Luna Oscura.-

Damien me miró con terror y asombro, no daba por sentado lo que había dicho. Y enseguida le conté todo.

"Sebastian y yo nos conocimos 2 meses después de que Mateo nació, un día iba caminando con Mateo en brazos en un centro comercial, cuando me encontró y no lo dudó ni dos veces para llevarme con él, pero se dio cuenta de que ya estaba marcada y que tenía un hijo pero no le importó en lo más mínimo, es más él aceptó darle su apellido al Niño y me negué rotundamente, me preguntó: "¿Por qué?" Y yo sólo le dije que mi hijo ya tenía un apellido y era el de su Padre.

Mi Mate y YoWhere stories live. Discover now