Mi Mate y Yo

Capítulo 11 "Una Impactante Verdad, Más Un Milagro" Parte 2

Creí que estaba soñando pero no era así... Mi mujer estaba despierta y sonriéndome, me acerqué a ella hasta la cama y la abracé con fuerza sin llegar a lastimarla.

-Amor... cálmate estoy bien...-La dejé de abrazar un momento y le di un beso apasionado que por culpa de la falta de oxígeno tuvimos que parar.

-Estás... despierta...

-Sí... lo estoy mi Lobo... lo estoy...-Me recosté un rato con ella y nos quedamos dormidos.

Al poco rato desperté al escuchar murmullos detrás de la puerta, me levanté para abrir la puerta pero Meredith me sujetó de la muñeca y me hizo una seña para que no abriera la puerta aún. A lo cual sonreí con entusiasmo, ella también sonrió pero su sonrisa era más bien picara.

***

Luego de unos minutos ya no se escuchó nada, ni un sólo murmullo detrás de la puerta.

Y no dudé en embestir a la hermosa pelirroja que tenía frente a mí en absoluto, pero lo hice de forma cuidadosa, aunque Meredith quería lo contrario. Y bueno... ya se imaginarán el resto. 😏

***

Narra Jade

Pasaron alrededor de dos malditas horas y todavía no podíamos ver a mi cuñada Meredith por lo que sabíamos era que ella podría despertar en cualquier momento y para ser completamente honesta ya me estoy desesperando.

Elena y yo habíamos ido a ver qué estaba pasando pero no conseguimos nada y además de que mi Padre y Damien nos sacaron de ahí cargando como costal de papas.

Papá me bajó y me dejó sentada en el sillón y Damien sentó a Elena en sus piernas y la sujetó fuertemente de la cintura para que no se escapara de su lado.

***
Pasó otra hora. Y todos estabamos en la sala de estar ansiosos por ver a Meredith pero... Un espécimen de nombre Jayden no bajaba a decirnos: "Vengan familia Meredith despertó" o algo así por el estilo.

Estaba recostada en el sillón más grande cuando miro de reojo hacia Damien y Elena quienes están sentados en uno de los sillones individuales juntos. Mi hermano tenía sentada en sus piernas a mi Cuñada, haciendo cosas de pareja que una de ellas fue besarse, hice una mueca no de asco sino de incomodidad.

Seguí mirándolos e interrumpí su sesión de besos cuando dije:-Damien, Cuñada, si van hacer eso váyanse y búsquense un cuarto para los dos solos y les aviso cuando el espécimen venga y nos dé luz verde.-Elena tan sólo soltó una fuerte carcajada y Damien en cambio me gruñó por interrumpir su momento con Elena.

Elena lo calmó poniendo una mano en su mejilla y su mirada se suavizó un poco, pero no demasiado. Ella rodó los ojos sabiendo lo que el señor quería y le dio un beso en la mejilla. Y este sonrió triunfante ante su logro.

Me limité a sonreír negando con la cabeza y me dediqué a mirar hacia el techo esperando y esperando, e incluso mi papá para mi sorpresa no estaba nada impaciente es más diría que él sabía lo qué estaba pasando en esa habitación. E incluso yo pienso lo mismo que él, pero no me gusta precipitarme ante la idea.

Estaba por quedarme dormida cuando recibí un mensaje desconocido, fruncí el ceño preguntándome quién era y al ver la foto de perfil supe que era Sebastian quien me preguntó por el estado de Meredith.

Rodeé los ojos y sólo me limité a decirle que todavía no había noticias sobre su estado aún. Estaba por dejar mi celular en mi bolsillo del pantalón cuando recibí otro mensaje de él pidiéndome que le informara en cuanto supiera algo a lo cual dije que si.