Mi Mate y Yo

Capítulo 7 "La Sombra del Pasado, El Reencuentro de dos Almas" parte 1

Narra Meredith

Después de hablar con Elena, me sentí más tranquila y sobretodo aliviada ya que finalmente pude liberarme de la enorme carga que llevaba sobre mis hombros.

Fui a casa pensando en todo lo que Elena me había dicho, ella tenía razón debo hablar con Jayden, decirle la verdad y sobretodo hacerle saber que no estoy muerta, que estoy viva.

Pero no podía darme el lujo de hacer tal cosa sin tener un plan de ante mano. Es irónico porque durante mi vida siempre fui una mujer directa, decidida, de carácter fuerte y valiente que no tenía miedo de decir la verdad. Esa era yo.

Y ahora actualmente no me atrevo a hablarle a Jayden y mucho menos decirle la verdad, soy una cobarde.

El día que "morí" pensé que todo se había terminado y a decir verdad lo creí, pero algo o alguien decidió que yo tenía que seguir viviendo que todavía no era mi hora de partir.

Me senté a lado de ventana mirando hacia la nada pensando en todo lo que viví antes y después de conocer a Jayden, todos esos recuerdos invadían mi mente sintiéndome culpable de todo lo que hice y de lo que estuve a punto de hacerle a la manada que me recibió con los brazos abiertos, por culpa de mi estúpida idea de destruirla creyéndola culpable de la muerte de mi hermano gemelo Noah.

Pero el punto es que no lo hice porque me enamoré y no lo niego en absoluto, es más lo digo con orgullo.

No sé cómo debo acercarme a él sin que se asuste o crea que se está volviendo loco, para ser honesta no tengo nada en mente.

Desearía regresar el tiempo y hacer las cosas diferentes, pero por desgracia no puedo hacer eso y lo peor de todo es que... cada recuerdo que pasa por mi mente me hace dudar el hecho de darle la cara.

Pero sé que tarde o temprano tengo que hacerlo, porque será peor si Jayden se entera por sí mismo o si se entera por algo o alguien y es lo que menos deseo.

Aún recuerdo como si fuera ayer cuando Damien descubrió mis intenciones de destruir desde adentro a la Manada, ese día me confrontó y reclamó, me dijo que no iba a permitir que su hermano muriera por mi culpa, y si para eso tenía que matarme lo iba hacer.

Me derrumbé y le confesé todo, absolutamente todo. Damien me perdonó la vida y me propuso un plan en el que él mataría a Sara y después iría detrás de los Cazadores, estuve de acuerdo, acepté sin dudarlo.

Pero el plan salió mal y terminé pagando las consecuencias con una bala de plata en mi pecho, literalmente.

Pensé que había muerto, pero... no fue así desperté en el hospital de la Manada Luna Oscura, ahí fue donde conocí a Sebastian. Mi segundo Mate, quien se obsesionó con que yo fuera su Luna, pero no podía hacerle tal cosa a Jayden, así que en cuanto me recuperé me escapé a tiempo de ese lugar.

Estuve vagando un tiempo sola sin rumbo alguno, después de un tiempo los Cazadores me perdonaron y decidieron que ya era tiempo de hacer el "Tratado de Reconciliación", el cual consta de hacer un pacto de paz en el que se hace una tregua entre ambas partes, así logrando evitar cualquier guerra o conflicto.

Estuve a punto de pedirle a Elena el favor de convencer a Damien de aceptar el tratado pero... no me atreví en absoluto.

Porque no lo creí prudente en ese momento y además sabía que Damien no cedería tan fácilmente después de estar de acuerdo con él en destruir a todos Cazadores por el bien de nuestra especie.

No sabía en qué estaba pensando, creo que fue el hecho de que estaba muy desesperada por encontrar una solución al problema en él me había metido que... por querer salvarle la vida a Jayden acepté sin pensarlo.