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Hola otra vez!
No quiero aburrir con un discurso en el inicio, muero por contarte lo siguiente, y no quiero tardar tanto, así que no diré más y comenzaré con esto...

Solo habían pasado dos días de la noticia de que Saúl pidió la mano de Axl en matrimonio. Únicamente. Roger aún estaba en ocho meses.

Todo estaba perfecto. El rubio no dejaba de atender a su bebé que aún estaba dentro de el.
Le decía cosas lindas, le ponía música, y si Charlie le "pedía" que se moviera para poder dormir, Roger sin dudarlo comenzaba a caminar de un lado al otro para complacer a su pequeño.

Evitaba comer cosas poco saludables, pero los antojos aún permanecían, y de vez en cuando comía lo que se le daba la gana.

Por su parte, Brian se describía como el hombre más feliz del mundo.

Le encantaba que cuando estaban por ir a dormir, el solía tocar ligeramente el estómago de Roger, y parecía que Charlie lo reconocía y se comenzaba a mover. Era muy adorable.

Pero algo aún más adorable para el rizado, es que por el embarazo, el cuerpo de Roger se hinchó un poco. Sus mejillas era aún más redondas y tiernas, sus manitas también lo eran.

Eso avergonzaba al menor, pero siempre cedía cuando Brian le recordaba que estuviera como estuviera, era hermoso, perfecto. Lo más divino que sus ojos pudieran ver.

Peter se mudó temporalmente a la casa del rubio. Ya que en cuanto Roger llegara a su fecha programada, sería el quien lo llevaría al hospital y atendería absolutamente todo. Y no quería estar para nada lejos. No se quería perder de nada.
Y realmente no había problema con nada de eso. Peter estaba tramitando su divorcio con su esposa por varios problemas de incompatibilidad irremediables. Daba igual si vivía en la casa de otra mujer.

Un día Roger se encontraba en su habitación, no tenía nada que hacer. Había ayudado a Winifred a hacer la cena, a limpiar un poco la casa e incluso ayudó en algunas cosas a su joven hermana, pero en realidad no podía hacer mucho, el cansancio lo vencía rápidamente. Pero finalmente tuvo un pequeño momento de privacidad.

Brian acababa de llegar de casa de sus padres con algunas cajas y maletas con su ropa y pertenencias. Estaba acomodando todo en algunos cajones.

- Y? Que hiciste hoy, Roger?

- Nada, Charlie no me deja hacer nada! Si me muevo demasiado me duele la espalda, pero si me dejo de mover, el bebé se enoja. Así que... -Brian rió un poco.

- Si... Me imagino.

De pronto apareció Peter en el umbral de la puerta, acababa de llegar de su trabajo.

- Hola chicos! -Les saludó amablemente.

- Hola! -Le contestaron, aunque la molestia se pudo notar en la voz del rizado.

- Que haces, Brian?

- Termino de mudarme, y estoy acomodando mi ropa, Peter -Dijo serio.

- Ah que bien... Por cierto, en que estás trabajando ahora, Brian? -Este se volteó, cerrando con su espalda en un empujo el cajón que estaba usando y se cruzó de brazos.

- Mi tío me dió un pequeño trabajo en su empresa.

- Ah si? De qué?

Ambos estaban tan concentrados en su plática, que no notaron en lo absoluto los gestos de dolor en la cara de Roger.

- De... Amm...

- No Brian, sea lo que sea, mereces más. Vamos, yo te puedo dar un buen puesto en mi empresa.

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