Su Perfume (Omegaverse)

6. Viento caluroso

Mis increíbles vacaciones habían llegado a su fin, y no pude ver a Ellie en las últimas semanas, ya que fue a la mansión de su abuelo. Esa gran e imponente casa, que se encontraba en lo más alto, dominando el territorio de esta minúscula ciudad.

Lo más aburrido era regresar a clases. Me senté de los últimos, y me dormí apenas coloqué la cabeza sobre mi mesa.

Julián fue quien me despertó al llegar. —Buenos días ¿No dormiste?—

—No, mi pila resultó quedarse en la casa de su abuelo— Él se rió de mi desgracia.

—Ya verás a mi hermano al salir de clases. Además, él también estuvo ansioso por tí, más de lo que imaginas. Liberó esporas como si estuviera en celo, es una calamidad— Comentó columpiandose en la silla.

—Voy a invitarle a mi casa hoy—

—Ten cuidado, te va a comer apenas te vea— Advirtió gracioso.

El profesor entró al aula y todos nos levantamos, saludamos rígidos y volvimos a sentarnos moviendo las sillas al mismo tiempo.

—Este es un año decisivo para todos ustedes, porque con una aceptación, podrán ir a la graduación de la escuela omega— Repartió un librito con especificaciones de los omegas que asistían a la escuela. Por supuesto, encontré a Ellie entre las páginas. Sentí un terrible temor golpearme el estómago, esta era la realidad de esta sociedad. —Los mejores en este año, podrán tener más de una oportunidad para conocer a un omega de su interés— Tragué saliva.

Salían las calificaciones de Ellie, sus habilidades, incluso una nota que decía «El omega más virtuoso de la academia, es un excelente cocinero, sus modales son adecuados para cualquier alpha, además de tener un libido probablemente insaciable, teniendo un alto índice de fertilidad. También cumple con una complexión fuerte, perfecta para parir...» No sabía si vomitar al ver esto o tan solo horrorizarme.

—Te ves pálido— Se preocupó mi amigo.

—Ellie sale aquí presentado como un... ¡No sé! Un objeto solo para criar. ¿Cómo voy a sentirme bien con eso?—

—Lo sé, me da miedo ver esto... Y no es el único, también aparecen omegas que no han salido de la escuela y que aún permanecen sin casarce, como el caso de Loan. Y Jesse aparece también— Mostró tristeza al leer su perfil. —Presentado como un delicado omega que necesita protección— Apretó los dientes. —Sé que en partes la información es real, pero sobre exagerada. Estoy seguro que Jesse apuñalaría a cualquier alpha desconocido que se le acerque... Ellie también es fuerte, y sus feromonas son suficiente para dejarte en el suelo... Esto es una mierda— Arrugó el papel entre sus manos.

Los alumnos comenzaban a elevar sus voces y una de las conversaciones me llamó la atención. A mi derecha estaba reunido el grupo de Francis, miraban el librito con deseo. —¿Qué piensas de este chico, Mark?— Le mostró Francis a uno de los catalogados como mejores alphas, y no es nadie más que el primo de Ellie.

—No seas estúpido, Francis— Dijo fríamente. —Yo no iría por alguien de baja calaña—

—¿Entonces quién?— Preguntaron.

—Por supuesto, iré por el del mejor del ranking—

—¿Hablas de Ellie?— Sonrió Abigail.

—¿Quién más iba a ser? Si se lo pido a mi abuela, ella fácilmente me dejará comprometerme con Ellie— Me levanté abruptamente de mi puesto.

—¡Repitelo, bastardo!—

—Oh... Tú eres el estupidito de los Rous— Dijo sin mirarme atentamente.