Historia

424 70 11
                                    



Abrí los ojos y observé un techo de madera antiguo, lleno de suciedad, sentí como si estuviera dentro de un sueño pues apenas sentía mi cuerpo y me pregunté si aún seguía viva.
Vagué mi vista para ubicarme y noté la presencia a mi lado izquierdo recargado sobre una pared con los ojos cerrados y el rostro relajado. Toque mi herida cuando punzo en mi tórax y la noté vendada, cerré los ojos por el dolor mientras me sentaba.

—¿Cuanto tiempo pasó?

—Un día— Soltó cansado.

—¿Que? ¿Estuve un día así? ¿Dónde estamos?— Mi herida dolió más conforme alzé la voz.

—No te muevas, no te esfuerces mucho— Su tono siempre era neutro y frío— Te traje a este lugar después de la neblina, es una casa del viejo mundo que encontré entre los bosques hace muchos años.

Una casa del viejo mundo. Recorrí con mis ojos el lugar, cada detalle y cada historia. Estaba descuidado y viejo, pero se mantenía de pie firmemente.
Decidí recorrerla con mis manos, cada asombroso detalle de esa vieja historia, una cocina, unas escaleras, la chimenea de piedra. Pise un vidrio haciendo que el cristal chillara y mire hacia eso que aplaste. Con emoción tomé ese cuadro del piso y soplé el polvo, era una familia, un hombre, una mujer y una pequeña niña haciendo una linda señal con su mano con un puño que solo alzaba el dedo índice y el dedo medio, sonreí, me pareció de lo más tierno.

—Olvidaba que es tu primera vez fuera.

Me acerqué a él con la foto y la observo desde arriba.

—Creo que era la familia que vivía aquí— Estaba tan emocionada que debía parecer una niña —Es una niña linda ¿verdad capitán?— Dije mirando al serio capitán, de que esto no es un escenario alegre, pero ese gesto y rostro apagarían cualquier fiesta.

Voltee la foto y observé una escritura en cursiva. Arturo, Clara y nuestra amada Sofía. Sonreí de nuevo y sorprendí al capitán husmeando en la foto.

Carraspeó y se giró para sentarse frente a su arma en una pequeña caja de madera.

—Ya me siento bien, capitán, creo que podemos volver o buscar a los demás.

—Acaba de oscurecer, no es buena idea salir.

Me senté frente a él en el piso quedando por debajo.

—Capitán Yoongi...

Su mirada vino a mi. Sus ojos oscuros tenían una profundidad y una historia similares a los de esta casa.

—Solo capitán.

—¿Como son esas cosas? Las bestias— pregunté curiosa pero con cierto miedo.

—¿En serio quieres saber eso?

—Soy un soldado, probablemente me enfrente a una alguna vez.

Sus ojos se mantenían firmes en los míos, tanto que podía ponerme nerviosa.

—Miden aproximadamente 2 metros, su anatomía es similar a la tuya y a la mía.

—¿A la mía?— Interrumpí exaltada.

—Llevan garras similares a los osos y dientes afilados como un animal carnívoro. Y eso son, animales carnívoros.

Trague saliva, jamás había sentido tanto miedo en toda mi vida, pude sentir como mi piel se erizó desde los pies a la cabeza.

—No son muy veloces, pero se aseguran de ir por tu carne.

—¿Porque no nos enseñan sobre ellos? Tal vez sabríamos como atacarlos con información y...

Girl meets evil: The eternal | JJK + MYG Where stories live. Discover now