Un Milagro de Navidad - Ziam [Adaptación]

Capítulo 19

Domingo, 30 de enero

Zayn descubrió que disfrutaba cocinando en la cocina  vanguardista de Liam.

Tenía todos los aparatos imaginables y armarios completamente equipados. En cierto modo, Liam tenía todo lo que Zayn no.

Desde un apartamento real a una máquina de café, era un hombre asentado. Por supuesto, Zayn iba en esa dirección antes de lo de Drew y el Sagrado Corazón, pero un año, y sus ahorros se esfumaron.

Si no hubiera conocido a Liam no habría habido ninguna posibilidad a corto plazo de que hubiera sido capaz de salir de la pequeña habitación encima de la cafetería.

Amaba estar en el apartamento de Liam. Se sentía cálido  y acogedor, y había puesto algunas de sus propias fotografías  junto a las de Liam.

Habían comprado una cama más grande e incluso había ganado la lucha para pagar la mitad. Por supuesto, su mitad saldría de algunas nebulosas ganancias futuras pero al menos Liam sabía que tenía la intención de pagar.

—Hoy me he encontrado de nuevo con Jason—Liam entabló conversación mientras preparaban la cena.

—¿Jason?—preguntó. No podía recordar a ningún colega de Liam llamado Jason.

—¿Te acuerdas? Es el tipo que mencioné la semana pasada, el que administra el refugio. Él que viene a trabajar con nosotros en los temas de la comunidad.

—Oh sí, ¿el ex militar?

—Espero que no te importe, pero le pedí que viniera a comer el sábado. Tiene algunas ideas sobre cómo podría ayudar a la policía en los problemas en el refugio de las personas que no tienen un techo para dormir, pero tengo la sensación de que algunas de sus ideas son un poco controvertidas como para ponerlas en práctica, así que pensé que sería bueno algo de privacidad.

Zayn miró a su novio y entrecerró los ojos.

—¿Por qué preguntas si estoy de acuerdo? —Se volvió a la nevera para encontrar la nata, los bizcochos no iban a hacerse solos. —Es tu apartamento—terminó en un murmullo.

Liam no dijo nada, y un dolor familiar se agarró al pecho de Zayn.

El salario de un maestro nunca iba a ser suficiente para ser parte de la vida de Liam a largo plazo. Liam tenía pantalones vaqueros en su armario que probablemente costaran más de lo que Zayn ganaba en una semana.

Antes de que pudiera perderse en demasiada autocompasión Liam estaba junto a él, y con firme insistencia le quitó la nata y la colocó de nuevo en la nevera antes de cerrar la puerta. 

Giró a Zayn hasta que estuvo frente a él, de espaldas a la nevera.

—¿Zayn...?—Liam se limitó a decir una cosa: su nombre, pero sonaba a pregunta.

Uso un solo dedo para presionar la barbilla de Zayn hasta que este no pudo hacer nada más que mirar a los hermosos ojos de Liam.

—¿Qué?—Zayn respondió amablemente.

—Es nuestro apartamento. —Liam hizo hincapié en ‘nuestro’.

—Está bien. —Zayn logró decir esa única palabra. ¿Qué más quería Liam que dijera?

—Zayn—dijo Liam. 

Zayn hizo una mueca. Vale. Ahora el tono era un poco menos cuestionador y un poco más acusador.

—Es... lo tengo...

Él no estaba del todo seguro de cómo debía plantear las palabras sin que la conversación se convirtiera en un argumento. Liam odiaba cuando Zayn se sentía inferior, pero el dinero era, y siempre sería, un tema polémico.