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Agarró el pomo de la puerta de la tienda y tiro, pero mi brazo se queda inmóvil.

-¿Está cerrada? -pregunta Ink.

Me di cuenta por primera vez de que las ventanas están oscuras. Me pongo las manos sobre los ojos y aprieto la nariz contra la ventana, pero mi madre no está. Me sacó las llaves del bolsillo y abro la puerta.

-¡Mamá!

No hay respuesta.

-¿Los sábados no suelen cerrar la tienda a las siete? -pregunta Ink.

-A lo mejor había poco movimiento.

Ink parece confuso, y es lógico que lo esté, yo que nunca hemos cerrado antes de la hora. No dice nada al respecto, pero rodea una cuna de bebé y se apoya en el mostrador.

-Enseguida vuelvo.

Despues de mirar en la sala de fiestas y el almacén y no encontrarla, voy a la caja registradora y la abro, pero está vacía. Debe de haberse llevado las ganancias para ingresarlas, pero ¿Porque iba a cerrar pronto sólo para eso? Tampoco he llegado tan tarde.

Me apresuro a subir las escaleras y entro en el apartamento.

-¡Mamá!

Me recibe el silencio. El contestador que hemos tenido desde que era pequeño no muestra la luz roja parpadeante de una llamada perdida, pero en la encimera hay una nota.

Geno, tenía una cita con el médico a las cinco y media. Como no estabas aquí, he decidido cerrar la tienda y llevarme las ganancias para ingresarlas de camino al médico. No te preocupes por volver a abrir, de todos modos habido poca gente. Espero que lo hayas pasado bien. Mamá.

Leo otra vez la nota. es difícil adivinar por un trozo de papel si alguien estába enfadado al escribir en él. Le doy la vuelta y pasó la mano por la parte trasera, para ver lo profundas que han quedado las palabras en la hoja. Después la sujeto cerca de la luz para ver si la escritura parece apresurada o furiosa, pero me da la impresión de que lo escrito una persona de un humor normal. Suelto un suspiro, dejó la nota otra vez encima de la encimera y después miro mi alrededor, sintiendo un poco perdido.

Vuelvo a la tienda. Ink está hablando por teléfono, así que sacó un producto de limpieza de los estantes de abajo de mostrador y comienzo a limpiar.

-Va a venir Error -dice Ink cuando cuelga, y entonces suena la campanilla de la puerta-. En plan ya.

Suelto una risa.

-Què rápido ha sido.

Error nos saluda con la mano y después levanta la mirada.

-¿Por qué está tan oscuro?

Señalo las luces.

-Las luces están apagadas.

Ink suelta una risa dulce.

-Me parece que quería saber porque están apagadas las luces.

Estoy algo distraído.

-Ah. Vale. Hemos cerrado pronto. ¿Qué van a hacer, chicos?

Miro alternativamente a Ink y a Error. es evidente que tenían planes antes de que yo le pidiera a Ink que me recogiera.

-Error ha venido para que podamos estar los dos contigo.

La distancia entre tú y yo [afterdeath]Where stories live. Discover now