Ares y Afrodita, un amor prohibido

Me suena tu voz, ¿Te conozco? - Cap. 7

Al llegar a los jardines ocultos de Afrodita, la veo de espaldas, tirada en ese pequeño estanque en medio de su jardín, así que me acerco para hablar con ella.

- Ares, te estaba esperando, aunque has salido antes de lo que había previsto (Afrodita)
- ¿Como sabías que iba a venir? (Ares)
- No, no lo sabía, mi dama divina te estaba esperando para darte la orden de mi parte para que llegaras aquí (Afrodita)
- Entiendo, perdona mi mala educación pero...¿Nos hemos visto antes? (Ares)
- ¿Por qué lo dices? (Afrodita)
- Bueno, es que me suena tu voz, quería saber si te conozco (Ares)
- Si, de hecho nos conocimos hace poco...(Afrodita)
- ¿Donde?
- Acércate, y dime si te suena mi cara, ya que creo que eres el único hombre que la ha visto (Afrodita)
Me acerco a ella y la veo...¡Es la chica molesta de antes, la que defendió al niño huérfano!
- Ya entiendo porque me has preguntado antes eso, lo de si mataría a un niño (Ares)
- ... (Afrodita)
- ¿No vas a decir nada? No entiendo porque todos te tienen en tal alta estima, tu solo eres la diosa del amor, ¿tanto miedo le da eso a los estúpidos con sentimientos? (Ares)
- ¿Por qué has dicho "los estúpidos son sentimientos? ¿Es que tu no tienes sentimientos? (Afrodita)
- No, no tengo sentimientos, tal vez por eso me de igual matar a un niño humano, pero no tiene remedio, es por culpa de mi etiqueta divina (Ares)
- Ya entiendo porque no te has enamorado de mi (Afrodita)
- ¿¡Qué dices , de qué hablas!? (Ares)
- Es la razón por la que llevo el velo divino, también es causa de mi etiqueta divina, todos los adultos que me vean la cara se enamorarán perdidamente de mi, sean dioses o humanos, pero claro, ahora que lo pienso, si no tienes sentimientos, no te puedes enamorar, ¿no es así? (Afrodita)
- Ya veo, entonces, ¿soy el único que te puede ver sin enamorarse de ti? (Ares)
- Al parecer si, y eso me hace feliz, por fin puedo hablar tranquilamente con alguien sin que tenga que llevar ese velo estúpido e incomodo (Afrodita)
- Si, y supongo que si no puedes enamorarme, tampoco puedes usar nada relacionado con tu etiqueta divina, ¿no es así? (Ares)
- Exacto (Afrodita)
- Bien, me siento el dios más poderoso de todo el Olimpo, al no sucumbir a tus encantos (Ares)
- Si, esto puede ser divertido, ya que si no te hace efecto la etiqueta divina de la diosa más poderosa, podrías llegar a ser el dios más poderoso de la historia (Afrodita)
- Eso me gusta, creo que nos podemos llevar muy bien (Ares)
- Si, entonces, ¿Amigos? (Afrodita)
- Por supuesto, amigos (Ares)

Y así fue como empezó la relación de amistad de Ares, el dios de la guerra, y Afrodita, la diosa del amor.