𝐭𝐡𝐢𝐫𝐭𝐲-𝐞𝐢𝐠𝐡𝐭

21.5K 1K 643
                                    

MIS PIERNAS EMPEZARON A DOLERME  mientras me acercaba al lugar designado que todos habíamos acordado antes

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.


MIS PIERNAS EMPEZARON A DOLERME mientras me acercaba al lugar designado que todos habíamos acordado antes. En caso de que tuviéramos éxito al arreglárnoslas para recuperar el oro de Ward, nos esconderíamos en la parte trasera de la marina en Figure Eight. No necesitabamos identificación para entrar y la seguridad solo patrullaba por la noche. Así que sabíamos que podíamos escondernos en paz entre la última fila de botes apilados y elevados. Las áreas boscosas de Figure Eight parecían inquietantes mientras corría más y más lejos de la pista de aterrizaje, pero no podía deshacerme del miedo que me mantenía a un ritmo que mi cuerpo apenas podía manejar.

Cuando llegué a la mitad trasera de la marina, finalmente pude dejar de correr, aunque la adrenalina todavía me corría por las venas. JJ nos había dicho que había una brecha escondida detrás de un arbusto que la marina nunca se molestó ni se preocupó de arreglar, y que podíamos entrar de esa manera en caso de que alguien estuviera patrullando el frente de la marina y no quisiéramos levantar sospechas. Yo no quería preguntar o saber, pero ahora, la información era útil. No me importaba que las ramas me rascaran la piel y se engancharan en mi ropa, solo quería estar en el lado más seguro cerca. Me agaché y caminé, saliendo al otro lado de la valla justo cuando el sonido de un avión sobrevolaba. Miré hacia arriba para ver lo que parecía el avión de Ward Cameron, sin duda con el oro todavía en el, sobrevolar y distanciarse de la isla.

Poco después, los gritos y el sonido de cosas rompiéndose vinieron de una vieja unidad de almacenamiento cubierta justo en frente de mí. Dudé en acercarme, pero mis pies se movieron antes de que pudiera detenerme. Los sonidos eran cada vez más fuertes, mezclados con una voz familiar que suplicaba al otro que se detuviera. Y justo cuando doblé la esquina, un gran bote de basura de metal se dirigía hacia mí. Rápidamente salté hacia atrás, casi evitando lo que habría sido, sin duda, una dolorosa colisión al ver a Pope de pie en la dirección en la que había salido el bote de basura, hiperventilando.

-¡Pope!-Gritó Kie, con miedo en su voz mientras lo miraba.

Su mirada se posó en mí y su rostro decayó mientras miraba el bote de basura frente a mí. JJ miró a continuación, preguntándose qué había llamado la atención de Pope y vi su postura tensa relajarse una vez que me vio.

-Juniper Bailey Collins, maldita idiota.- dijo, corriendo hacia mí y atrayéndome hacia él.-¡No vuelvas a hacer algo tan estúpido como eso!

-No puedo estrellar un coche contra una cerca, pero ¿puedes empuñar un arma como un maldito vaquero rebelde?-Me reí suavemente, enterrando mi rostro contra su camisa.

Se apartó, agarrándose a mis brazos.

-No, no puedes.-Apretó la mandíbula mientras me miraba, suspirando y aflojando la mandíbula antes de abrazarme de nuevo.-Tienes suerte de que te ame o estaría perdiendo la mierda ahora mismo.

-Estoy bien, pero, allí ... hubo un disparo cuando estaba corriendo y yo...-negué con la cabeza, alejándome de JJ.-No sé dónde están John B y Sarah. Él me hizo irme cuando la policía apareció.

VAPOR | OUTER BANKS ¹Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum