Hunter x Hunter Fanfic (Chrollo X Oc)

X - Isla Zevil - X

Llegamos los primeros, ahora sólo falta esperar. Hanzo y Pokkle fueron a sentarse distanciados del resto, por seguridad. Hisoka y Gittarakur se sentaron también contra la pared. Me acerqué a Hisoka, puesto a que podía oler sangre en él.

— Te han herido- afirmé dirigiéndome a Hisoka-.

— ¿Preocupada?

— No mucho, pero tenemos que esperar unas cuantas horas, no me importa curarte si quieres.

— Hm. Está bien.

Hisoka se hizo a un lado, para que me sentara entre él y Gittarakur. Levantó un poco su camiseta, mostrándome sus abdominales, un corte en las costillas y otro en el hombro.

Con la yema de los dedos rocé la piel junto a la herida. Mi mano emitió un suave brillo y un humo blanquecino acarició sus heridas, cerrándolas lentamente hasta no dejar siquiera cicatriz.

— Gracias, Muri. No me canso de verte usar tu nen.

— No hay de que, Soka. - le llamé por el mote cariñoso que le puse cuándo era más pequeña-.

— Oh, aún te acuerdas.

— Por supuesto. - le devolví la sonrisa-.

No dijimos nada más en las horas restantes. Poco a poco fueron llegando más participantes. Faltaba apenas un minuto de prueba cuando se abrió la última puerta y la voz del megáfono anunció la llegada de Killua, Gon, Kurapika, Leorio y Tompa.

Hisoka, que había permanecido todo el rato serio, dejó entrever inconscientemente una sonrisa. Me acerqué lo suficiente cómo para poder susurrarle al oído.

— Parece que has encontrado un juguete nuevo. - dije refieriéndome a Gon-.

— Mmm... Si... Es tan prometedor... - susurró casi gimiendo-.

— Sigo sin entender cómo puedes excitarte con éstas cosas.

— Oh, vamos, admite que también te emociona un buen contrincante.

— Por supuesto, pero no voy a mojar las bragas porque alguien presente pelea.

— Pues a mi me pone mucho poder pelear contra alguien fuerte.

— Seguro que te va el sado.

— ¿Quieres comprobarlo?

— Hisoka, - interviene Illumi- no quiero que pongas ni un dedo encima de Kemuri.

— Tranquilo, sólo estamos jugando. No voy a hacerle daño... A no ser que ella me lo pida.

— Cómo sigas provocándole algún día acabarás con una aguja clavada entre ceja y ceja. - advertí-.

Una puerta se abrió en la pared de la sala dónde nos encontrábamos, terminando al fin con nuestro aburrimiento. Salimos por ella y nos encontramos con el dueño de la prisión y examinador de ésta fase.

— Señoras y señores, felicidades por haber escapado de la Trick Tower. Sólo quedan la cuarta fase y la final del examen. La cuarta fase tendrá lugar allí, - dijo señalando tras de sí-.

— En la Isla Zevil. Procedamos. Necesitaré que saquéis un papel cada uno. Para determinar quién cazará y quién será cazado. Cojed una en el orden qué salisteis de la torre.

Hisoka se adelantó y sacó el primer papel, seguido por Gittarakur y después lo cogí yo. Miré ambos lados del papel, uno estaba en blanco, con una pegatina pegada en él y el otro lado tiene estampado el símbolo de los Hunter.

Finalmente todos obtuvimos un papel.

— Bien, quitad el sello de la targeta.

Retiré el plástico adhesivo que cubría una de las caras del papel, mostrándome el número 89.

— La targeta os indica vuestro objetivo. Vuestra misión es robar la placa de identificación de vuestro objetivo. Vuestra placa vale 3 puntos, y la de vuestro objetivo también. Las demás valen sólo un punto. Pasaran la fase aquellas personas que reúnan 6 puntos al final de la prueba. Tenéis 10 días.

Una vez quedó todo claro, nos subimos al barco que nos llevaría hasta la isla Zevil. A bordo, casi todos se habían quitado ya su placa y se miraban entre ellos recelosos. Una mujer nos felicitó a todos por pasar la prueba y bla, bla, bla. Siquiera escuché qué más decía.

Noto cómo alguien se me acerca por la espalda, pero no me giro, ya he notado que es Hisoka. Se apoya con los codos en la barandilla de madera y reposa su cabeza encima de sus manos.

— ¿Qué número tienes, Muri chan?

— Tal vez el tuyo, ¿Me lo darías?

— Tal vez.

Sin decir nada más, saca el papel de vete a saber tu dónde cómo si fuera un truco de magia y me muestra su número.

Le ha tocado el número 87.

Suspiro, algo más relajada sabiendo que no soy su objetivo. Sacó mi papel con el número 89 y se lo muestro.

— ¿Sabes quién es? - me pregunta-.

— No, la verdad es que no. Cogeré tres si no tengo suerte en las primeras que encuentre. - digo encogiéndome de hombros-.

— Yo estoy igual.

Al rato, llegamos a la isla y pusieron una pasarela para bajar del navío. Nos piden bajar por el orden que terminamos la última prueba.

Primero fue Hisoka, después bajó Gittarackur y después me tocó a mi.

Y así fuimos bajando uno a uno para dar comienzo a la cuarta prueba.