"La Hija del Marido de mi Madre" (Sasusaku +18)

4- Provocadora

Salí de mi cuarto y vi la puerta del suyo abierta una parte de mi deseaba encontrarla desnuda sobre el edredón esperándome.

La maldita niña me ponia caliente como el infierno, curioso como fui siempre, me asomé, pero la cama estaba tendida y no había rastros de ella.

Esperaba encontrarla en la cocina, pero tampoco estaba.

-¡Saku! -Grité, pero no tuve respuesta.

Irritado decidí desayunar solo.
Me prepare un café, respondí algunos mensajes de Naruto.

Había quedado con lo chicos para entrenar, pero mi nueva tarea de vigilante, me tendría algo ocupado.

Por suerte las vacaciones habían empezado, y podía darme unos días de relax.

Pasó media mañana, ya empezaba a ponerme molesto, cuando llegó como si nada, completamente sudada y luciendo ropa de gimnasia.

-¿No hay olor a comida? pesimo servicio- se quejó y pasó junto a mi para tomar agua fresca de la heladera. -Necesito una ducha.

Me quede viendola embobado. Las calzas se le pegaban a las piernas como una segunda piel, imagine sus muslos envolviendo mi cadera.
Ella pareció notar que me había abstraído viéndola y a propósito se quitó la sudadera, quedando solo con un sujetador deportivo.

Sacudí la cabeza y la sentí reir.
-¿Podrías tan solo dejarme una nota? Mi madre y tu padre esperan que yo sea tu anfitrión mientras ellos no estan. Y también necesito tu número de teléfono. - dije sin miramientos.-No puedo estar preocupado cada vez que decides desaparecer.

-¿Estas seguro que solo quieres mi número por eso? - me guiño un ojo y se perdió en el pasillo de las habitaciones.

-Provocadora... -le grite y sentí su carcajada.

Como por inercia me puse a preparar el almuerzo.

Mi teléfono vibró y atendí mientras daba vuelta el omelette.

-Diga- respondí.

- ¡Teme! ¡Día de playa! ¿Nos vemos en el parador de Shino?. Van a estar todos.

- Mmm, no lo sé, veo que planea la molestia. Mi madre me pidió que le de una mano hasta que vuelvan, la ruta sigue bloqueada.

-¡Invítala! ¡No puedes quedarte encerrado cuidando de ella todo el verano!

-Esta bien, nos vemos ahí. - Por lo poco que conocía a Sakura, estaba seguro que el día en la playa le iba a parecer un estupenda idea.

Ella apareció con un vestidito blanco muy fino, la tela se translucia dejando ver unas bragas del estilo "hilo dental".
Y porque Dios definitivamente me ama, ella no tenía sostén.

Puse el plato frente a ella, y le servi zumo de naranja.

-Mmmm, mi propio chef durante las vacaciones. Esto se pone interesante.

-No te ilusiones molestia, espero que tu padre y mi madre puedan venir pronto. No voy a pasar mi verano cuidandote.

-No necesito que me cuiden.

Levante mi móvil y le enseñe el último mensaje de su padre. Donde me pedia que cuide de ella.

Una mueca de inconformidad se formó en su boca.

-Tampoco soy tan aburrido. - me crucé de brazos fingiendo estar ofendido.

-Llevamos un día y ya arruinaste mi primer fiesta.- reclamó indignada.

-Te deje terminar- dije con una mueca.

-Ah, bueno, ¿debo agradecerte por eso? Para que sepas pensaba seguir, no todos quedaron satisfechos anoche.

Solte la risa, - ¿asi que sólo ellos se fueron contentos?

-Eres un imbécil.

-Me lo has dicho varias veces. Tal vez me lo crea.

Se encogió de hombros.

>>Puedo resarcir tan desafortunada primera impresión. - levantó una ceja y dejo el tenedor junto al plato.

-Bueno, cocinaste, y se puede decir que es comestible... Vas por buen camino.

-¿Es decir que si te invitara a un día de playa con mis amigos olvidarías que arruine parte de tu noche?

Una sonrisa lleno su cara y deduje que la idea no le desagradaba.

Terminamos de almorzar y ella junto la mesa y lavo los platos.

-Siempre usas tantas cosas para preparar algo tan básico como un omelette.- Se quejó y yo me reí al verla. Puede que tuviera razón, podria haber batido todos los huevos juntos en vez de usar tres recipientes distintos. Y cocinarlos en el mismo sartén en vez de usar dos.

Nos fuimos a cambiar para ir a la playa.

Cuando salió de la habitación estaba muy sexi, y casi me arrepiento de aceptar llevarla.
Los buitres de mis amigos van a estar enloquecidos con ella.