░❝Kɪᴛᴛɪᴇ❞ ✿ Sunki ༄

Tᴡᴇɴᴛʏ ᴇɪɢʜᴛʜ "¡Hɪ!"

"¡Hola, soy del grupo de excursión del campamento de los abejorros explotadores...! ¿Es aquí la fábrica de galletas?"

Un golpe se hizo presente en aquella puerta bien cubierta, un chico pelinegro con una mochila saludo amablemente a la voz ronca del otro lado de la puerta que le pidió que se largara.

"Oh, ¿Entonces no lo es?"

Una alta figura sale de ese lugar, bien vestido pero cómodo, perfecto para perseguirlo y dispararle si es necesario.

"Te he dicho que te largues, si no lo haces me encargaré yo mismo de echarte." Le dijo con más agresividad.

"Oh, no hace falta yo..." Una ceja fue arqueada por el hombre ante el silencio misterioso del chico. "Vine para recuperar lo que es mío."

No hubo tiempo de pensar para el guardia, un lobo gris se abalanzó sobre el, mordiendo y desgarrando su piel, tan pronto sucedió, la manada de lobos entró al lugar con rapidez, dispuestos a encontrar al pequeño lince.

"Eres un gran actor Sunoo... Tsk, pobre tipo, definitivamente está muerto." Park apareció y pateó la cabeza masacrada del guardia. "En fin, entremos, tenemos que encontrar a Niki."

"Vamos, está vez no pienso perderlo."

El escándalo en el lugar era enorme, los cuerpos humanos estaban derramados en el suelo llenos de sangre, los lobos heridos eran atendidos por Jay, de algo le servía haber llevado algunos cursos de enfermería antes, ¿No?

"Hemos acabado con esta y la segunda planta, si la información que nos han dado no estaba mal, no hay muchas personas aquí adentro, sin contar a los chicos que han capturado." Informo Geonu olfateando las paredes. "Cómo me gustaría liberarlos a ellos también, pero la protección es demasiada, no podemos derribar las puertas."

"Mierda..." Dice Jongseong terminando de venderle el brazo, una herida sangrante estaba presente. "¡Sunoo!" Un arma es lanzada al azabache. "Ve a buscar a Taki, y úsala si es necesario."

El solo le dio una afirmación y salió corriendo a buscar a su pequeño gatito, no dejaría que sufriera más, haría lo posible por salvarlo del maldito hombre que lo tenía encerrado.

Maratón 2/5