Lunática|| Época Merodeadora

Capítulo 27

《Celos》

Ya había pasado una semana del regreso a clases. Regulus le tuvo que contar a la fuerza a Lana que Sirius se había ido sin el. Algo que hizo enojar a la rubia, el mayor Black se ganó un regaño súper fuerte. Tardo un par de días para que ella lo perdonaste, aunque sabía que esas disculpas tenían que ir hacia su hermano.

En cuanto a Regulus solia observar más de lo habitual a Lana. Cuando pasaba por los pasillos podía escuchar como su hermano le coqueteaba, haciendo que su sangre hirviera. Le agarraban ganas de agarrarla del brazo y llevársela lo más lejos posible de su hermano. Y ahí fue cuando lo confirmó le gustaba Lana, o mejor dicho le encantaba Lana. Cada ves que la veía quería besarla o abrazarla, queria que ella fuera su todo y no sabía hasta cuándo iba a aguantar.

Lana y Lily se dirigían al lago negro, desde que empezó a salir con James ya no pasaban mucho tiempo juntas. Pero cuando tenían la oportunidad no la desperdiciaban ni un minuto.

Aunque su momento de paz no duró mucho, ya que los meroreadores llegaron a interrumpir su momento.

-- Hola Lana, hola amor.- saludo James y beso a Lily.

-- Hola chicas, James ya te dije no comas delante de los pobres.- Replicó Sirius.

-- Canuto vos estás celoso porque no tenes novia.

-- Me vale verga, pinche zorra.

-- ash Sirius, cállate.- pidió Remus.

-- Bueno mami.- y se calló.

El resto de la tarde la compartieron entre risas y bromas.

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Sirius desde su cama observaba a Lana y a su hermano en la torre de astronomía. Siempre tenía la duda que es lo que hacían, aunque con el regaño que se llevo la otra vez, supuso que eran buenos amigos.

Mientras tanto Regulus le contaba una historia que leyó a la rubia. Entra risas y un breve silencio sentados uno al lado del otro, Lana quedó dormida apoyada en el hombro del chico. Este no pudo evitar observarla con ternura, solo estaba buscando que sus palabras salieran por si solas, y le pudiera expresar lo que siente.

Después de un rato desperto a Lana y cada uno se fue por su lado con una sonrisa en ambos rostros.

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La habitación de la pelirroja estaba vacía, solo se encontraban la rubia y ella. Lana con la mirada perdida, sumida en sus pensamientos observaba el techo. Mientras que la pelirroja la miraba con atención.

-- ¿Qué tienes La?- preguntó.

-- ¿Cómo supiste que te gustaba James?

-- Bueno, voy a admitir que siempre me gustó, pero pensaba que quizás el jugaba conmigo. Me gusta cada cosa que sale por su boca, la forma en la que expresa lo que siente por mi y como puede poner a sus pies con su forma de ser. Quizás el sea el amor de mi vida, sabes a lo que me refiero. Desde que salgo con el me siento como nueva, no me siento querida, no malinterpretes también me haces sentir querida. Aunque no de la misma forma, el me da el amor de un novio y vos el de una amiga. Pero aún así no puedo expresar con palabras la respuesta a tu pregunta La.

-- Es muy cursi.- respondió con una sonrisa.

Y es que Lana entendió que por Regulus no tenía sentimientos de amigos. Ella realmente gustaba de él, ¿pero como lo tenía que expresar?

-- ¿Porque la pregunta?- Lily observo con curiosidad a su amiga.

-- Creo que me gusta Regulus.

La pelirroja abrió la boca sorprendida, pero luego de unos segundos se puso a gritar y a bailar de la emoción.

-- Siempre pensé que terminarías con Sirius, pero ciertamente harían una pareja muy bonita.

-- Ya cállate Lils, lo único que voy a decir es que pronto tendré mis medias de unicornios.