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Donovan no pudo sacar la imagen de James de su cabeza después de aquello. Había sentido el impulso de saludarlo cuando lo vio corriendo con sus compañeros en la pista, pero en realidad no se conocían de nada y no tenía ganas de parecer un tipo incómodo. Además, se suponía que estaba ahí para dibujar, así que se quedó en su lugar y siguió compartiendo algunos comentarios con Skylar mientras intentaba aprovechar la oportunidad y entrenaba un poco la mano. Estaba seguro de que aquello no le ayudaría a odiar menos los retratos, pero le serviría de práctica. Tener referencias siempre ayudaba.

Cuando el profesor de la clase deportes, o la que fuera aquella materia, miró el trabajo que habían hecho, se tomó su tiempo para machacarlo por la evidente diferencia de habilidades entre él y su amiga. Si era justo, muy pocos en su clase estaban a la altura de Skylar, por lo que no se lo tomó como una ofensa.

Donovan no tenía un ego tan grande como para querer compararse con ella, aunque ciertamente su confianza a veces era desproporcionada con respecto a lo que tenía para mostrar. Como sea, le dedicó una sonrisa al hombre y se rio de sus chistes aunque no tuvieran gracia.

La gente encontraba desconcertante el hecho de que Donovan no fuese una persona fácil de molestar y el profesor al final terminó por darle una palmadita en la espalda y dejarlos ir sin más. Estaba seguro de que había un poco de decepción en su rostro al no conseguir una reacción. Él sabía que a cierto tipo de personas le gustaba la idea de sacarlo de sus casillas, por lo que a esas alturas estaba muy entrenado contra cualquiera que lo intentara. Su personalidad de por si era tranquila, así que al final, eran los demás quienes terminaban chocando contra una pared.

Antes de que salieran de las pistas se giró un segundo para mirar a James. El muchacho estaba descansando sobre el pasto, tenía un termo de agua en las manos y observaba con expresión neutral a sus compañeros que seguían corriendo como posesos. El cabello tan corto por lo regular solo le sentaba bien a cierto tipo de rostros y estaba seguro que la simetría en la cara de James era lo suficientemente buena como para que la falta de cabello no disminuyera lo atractivo de sus facciones.

Siguió andando, mientras Skylar se quejaba de la actitud del profesor.

—No le hagas caso, es un viejo amargado —comentó, tratando de hacerlo sentir mejor, aunque él no se había ofendido en primer lugar.

Como sea, su mente regresó a James ¿Por qué usaba el pelo largo cuando lo vio por primera vez? Y ¿Por qué ahora lo tenía tan corto? Quizás sus gustos en moda habían cambiado mientras crecía o los reglamentos de la escuela a la que asistió eran poco convencionales. Era muy extraño que en su época de instituto usara el cabello hasta los hombros, mientras que ahora lo llevaba corto. Normalmente los chicos comenzaban a dejar de raparse cuando entraban a la universidad, no al revés.

¿La facultad de deportes tendría reglas diferentes a las demás? Porque muchos de sus compañeros parecían querer competir por ser la nueva Rapunzel y nadie les decía nada.

Donovan tuvo a James rondando en su cabeza el resto del día, mientras se hacía preguntas intrascendentes con respecto al chico. Por alguna razón se había obsesionado con el tema del cabello y con esa cara que parecía no haber cambiado en lo absoluto, pero que, a su vez, estaba ensombrecida por el tiempo. Donovan era bueno para los detalles y no pudo evitar notar que durante la carrera en la clase de deportes, James no habló jamás con otra persona. Nadie de su clase se acercó a preguntarle siquiera por la hora, parecía que fuese un fantasma invisible en medio del montón de alumnos que corrían alrededor de la pista de carreras.

Sintió más curiosidad conforme pasaron los días.

Era gracioso, entre sus expectativas no estaba el volver a encontrarlo pronto, así que gastó mucho tiempo recreando los detalles de su rostro en su cabeza, tratando de descubrir cosas que había pasado por alto en el primer vistazo, así que, cuando se lo cruzó una vez más tuvo la extraña sensación de que lo estaba acosando.

El destino de las estrellasWhere stories live. Discover now