Un loco en Highschool DxD

Un loco en DxD[19]

-Te estás ablandando Mittelt, creo que esos niños no tienen futuro, no aquí y nunca.

La mencionada observó a su líder, todo en la vista de los niños presentes, que parecían estar demasiado temblorosos, la adolescente rubia les había prometido qué dejarían el estado de la calle y la reemplazarían por una vida mejor, sabían la existencia de lo sobrenatural y, sin embargo creían que podrían confiar en ella.

-Am, disculpe…… Señor. Haremos todo lo que este a nuestro alcance para servirle, pero por favor no nos abandoné.

Hablo la niña de pelo blanco, su aspecto era demacrado y menudo, con una constitución más bien desnutrida a causa de su vida, su cabello blanco canoso y sucio le llegaba hasta el hombro, junto con una mirada que a pesar de su condición, derretiría el corazón del más frío.

Pero, no estamos hablando de cualquiera, Elver no sintió nada al verla suplicar y, si lo hizo, no lo demostró. Lentamente dirigió la mirada hasta Mittelt, quien parecía estar demasiado nerviosa.

-Tu me dijiste que vienes de la calle, y sobresaliste entre toda esa basura, ¿Por qué estos niños no pueden hacerlo?. ¿Que te hace tan especial?.

Mittelt replicó, bueno. Tenía razón hasta cierto punto, Elver dudaba de que los niños acá presentes podrían o tendrían las agallas para hacer lo que el hizo, a simple vista eran solo unos niños desamparados que no matarían ni a una mosca.

-Además, ya me dijiste que estaba bien, el líder de la cruzada Argenta no puede retroceder en sus palabras. ¿No crees?.

Mittelt añadió, eso siempre funcionaba con los altos rangos en la facción caída y, sin embargo está no era esa facción, no estaba hablando con Azazel o cualquier otro superior.

Tragando frío, comenzó a temblar en su posición, Elver la estaba mirando demasiado serio, directamente a los ojos de la mujer. La tensión parecía desbordar del pelinegro.

Todo hasta que una niña de cabello rojo sangre, casi superando a Rias Gremory interrumpió, parecía oscilar entre los diez y doce años, junto a su cuerpo malherido y desnutrido, cosa que era común en los niños presentes, tenía el cabello corto casi simulando ser el corte que usaban los varones, y con lo que parece ser una especie de bolsa de tela a modo de túnica.

-¿Onii-chan no nos quieres?. ¿Por qué?, Estamos dispuestas a seguirte hasta la muerte.

Los demás en la sala parecieron mirar al Averno, la más pequeña de ellos se acercó hasta donde no debería.

-Hanabi no……..

Hablo uno de los niños con cabello negro.

Elver pareció congelarse en su lugar, pensando y analizando, tenía el rostro estoico y una mirada fría, todo mientras la niña de cabello rojo continuaba aferrándose a sus piernas, ¿Qué acaso es un koala?.

Elver parecía ser tan calmado en todos los escenarios, no obstante.

-¡Oh no!, Por qué tenía que decirme onii-chan, eso es tan kawaii. Maldición, debo contenerme, pero es tan linda y parece tan abrazable.

Aclarandose la voz en una tos falsa, Elver llamo la atención de los presentes.

-Em……… Bueno…….. no es que dijera que no……… pueden quedarse, pero Mittelt se encargará de su entrenamiento. ¿Vale?.

Dijo, algo tembloroso y tartamudo.

-“Oh, curioso, si, demasiado curioso”.

Dijo Mittelt en su mente, ¿O es que acaso Elver tiene?. Sonriendo pícara la rubia comenzó a caminar hasta Elver.