Capítulo 13

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✨Editado✨

MARATÓN 2/2

"De la tierra renacerá"

Silencio.

Pasan tal vez dos segundos en los que me quedo perdida en el rojo sucio del cabello de Vega y esos ojos azules idénticos a los de una niña que me espera a unos kilómetros de aquí, antes de que me quite mi abrigo para cubrirla lo más que pueda, está prácticamente desnuda, solo lleva puesta una camiseta blanca sin mangas sucia y rota, y algo que parece ser un pantalón negro, en el mismo estado que la otra prenda, y por supuesto, está repleta de tierra húmeda por el río a pocos metros.

Alister imita mi movimiento y también se quita su abrigo para ayudarme a cubrirla, hace demasiado frío. Sin siquiera pensarlo la abrazo y puedo sentir como su menudo cuerpo tiembla bajo el mío, cierro mis ojos y pronto puedo sentir la mano de Alister en mi espalda.

De inmediato ese sentimiento de tranquilidad me inunda por completo, él tiene esa habilidad de tranquilizarme con solo tocarme.

—Ella está en el jardín —le susurro a él, no quiero que Vega vea a Noreen así, ni que su hija la vea, se asustará.

Siento un pequeño golpe de magia y entreabro uno de mis ojos para ver la nube verdosa surgir bajo mis pies, pienso en casa y luego los tres desaparecemos. Cuando abro mis ojos, noto que estamos en mi habitación, me levanto al instante levantando a Vega conmigo y rodeándola con mis brazos camino directo al baño y bloqueo la puerta que va hacia la habitación de su hija.

Alister me sigue al baño y abre la ducha mientras despacio encamino a la pelirroja hacia ella mientras le hablo para tranquilizarla.

—Tranquila, ya estas a salvo, descuida, aquí estoy —digo aun caminando hacia la ducha, ella solo sigue mis pasos, parece pérdida, volteo para ver a Alister —. Ve por Bash.

Alister asiente y desaparece del baño, puedo oír sus fuertes pisadas salir de mi habitación. Casi al instante en que digo su nombre, ella gira su cabeza como si supiera de quien hablo, y claramente lo sabe, sus ojos se abren más, la veo arrugar su ceño como si quisiera hacer algo que no puede.

—Mi bebe —dice con la voz estrujada y ronca, le cuesta hablar, el dolor en sus facciones me lo confirma, pero aun así, se esfuerza por hablar —. Mi bebe.

Mi corazón late rápido al notar que habla de Noreen, soy consciente que no estuve aquí en los años en los que fue madre, ni mucho menos en su embarazo, pero, aunque alguien me dijese lo contrario, jamás dudaría que Vega fue cariñosa con su hija. Nadie mejor que ella sabe lo que es querer el amor de una madre.

—Ella está bien, Vega. Noreen está bien, te lo prometo. Ven —la siento dentro de la bañera en la que hace unas horas, su hija estaba jugando a que tenía que salvar a sus juguetes de una tormenta en el océano.

No sé qué ocurrió. Tampoco sé cómo es que está aquí, o cómo fue que apareció en la tierra. No comprendo cómo, ni que está pasando ahora. Pero lo último que me importa es ayudarla justo ahora, nada más. Solo quiero ayudar a mi amiga.

Y tal como lo esperaba, en menos de un minuto oigo la puerta de mi habitación abrirse con fuerza y ver a Bash arrodillado a mi lado con la expresión desesperada y sus ojos algo cristalinos. Rápidamente me aparto y me levanto quedando atrás de ellos. Veo como al instante mi mejor amigo lleva sus manos a las mejillas de ella y une sus frentes mientras cierra los ojos y le susurra algo que solo ella puede oír. Vega rodea las muñecas de Bash y puedo ver como suelta un sollozo.

Me quedo pasmada viéndolos, inmóvil, no me puedo mover... estoy sorprendida, confundida, alegre, eufórica, y muchas otras emociones. Siento unas manos ubicarse en mis brazos y es entonces que mi cuerpo reacciona y volteo para encontrarme con Alister mirándome y hablándome con sus ojos, solo como él sabe hacer. Y es entonces cuando reacciono verdaderamente.

Vuelve a Mi  (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora