Caos.

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Era demasiada la información para procesar en un tiempo limitado

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Era demasiada la información para procesar en un tiempo limitado.

Itadori hace un instante iba a marcarlo, por las feromonas marcadas en ese olor cítrico podía afirmarlo: actuaba como un alfa. Pero ahora, el pelirosa se encontraba aferrándose al kimono de Sukuna, el cual mantenía una burlona sonrisa al ver al que ahora era un omega tan desesperado por hundir su nariz en su cuello.

>> ¿Acaso él... puede ser ambos?

Inumaki fijo su mirada en el pelinegro, el cual también se encontraba en celo.

>> Seguramente él lo causo, pero...

¿Es la cantidad o la pureza de la clase la que determina qué lado domina a Yuuji?

No estaba del todo seguro con ello, más la segunda opción parecía ser la clave en ello. Bastaba con solo fijarse en cómo cambio la actitud de Itadori con la presencia del líder de Psovke.

Tuvo que reprimir un claro sonido de frustración, no podía demostrar lo acorralado que se encontraba. Primero, tenía que ver cómo avisarle a los demás la situación actual, quizás si gritaba se acercarían los guardias.

Gojo pudo haberlos retirado del calabozo, no obstante, debían estar dentro de un rango cercano para poder vigilar al prisionero. Solo debía pensar cómo hacer...

 Ni siquiera te molestes. – El peliblanco se sobre salto al oír la voz del alfa. – Sé lo que piensas, créeme, es inútil.

 ¿Acaso a Gojo no le importa quién sea guardia? – La voz burlona del nuevo intruso capto su atención. – No dieron ni una buena pelea. – Menciono, elevando su mano la cual sujetaba dos cabezas de los soldados.

>> Mierda.

Toge sintió unas enormes ganas de golpearse.

Por el estado de las cabezas podía ver que llevaban muertos al menos una hora y por el jodido aroma a canela no percibió el de la sangre.

 M-Mahito...

 Oh Junpei, no pensé que nuestro encuentro sería justo como nos conocimos. – Toge miro con evidente sorpresa al prisionero. - ¿Debería ocuparme de ti? – Agrego el peligris con burla, acercando su mano a los cabellos del omega.

 Aléjate de mí.

 Oh vamos, tu alfa te tratará muy bien. – añadió, el vano intento de Yoshino por alejarse de Mahito causando que se mostrará parte de su piel.

>> Una marca.

Esta vez, Inumaki no pudo evitar demostrar su frustración con un ceño fruncido.

El lazo había sido su guía.

La escasez de aroma en el omega era porque se encontraba separado del peligris, la misma cicatriz en la curvatura de su cuello y hombro delataba que no había sido renovada hace bastante. La moral sobre no exponer a Junpei a algo que adulterará sus derechos les había jugado en contra.

Last Piece ▪︎ GoYuuKde žijí příběhy. Začni objevovat