Capítulo 37: Aquí vamos de nuevo.

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‘‘Hannah está estable. Tiene un esguince en el cuello. No perdió mucha sangre, aunque tuvo unos cortes en diversas partes de su cuerpo, por suerte una de ellas no le tocó la yugular pero estaba a punto. Si hubiera sido así hubiera muerto antes de llegar al hospital por desangrarse ya que cuando se corta la yugular se tarda menos de diez minutos en fallecer. Llegó inconsciente por la intensidad del dolor pero está bien, le repondremos la sangre que perdió y cerraremos las heridas’’

‘‘Gracias a Dios’’ Zayn suspiró

‘‘¿Y Dakota?’’

‘‘Verán, Dakota llegó demasiada delicada, ya que perdió acerca de tres litros de sangre. Cortes en el cuerpo, en el abdomen, en el brazo el cual estaba a punto de fracturarse, por ejemplo…como Hannah. Estaba a punto de entrar en coma’’


Abrí más los ojos.

‘‘¿Pero, ya está bien?’’

‘‘Esta aún en observación, por suerte conseguimos la sangre suficiente y le hicimos la transfusión. Ahorita está dormida y le colocamos morfina para el dolor. Tendremos que esperar a cómo reacciona’' 

‘‘Bien, gracias’’ Asentí

Asintió alejándose de nuevo.

Suspiré sintiendo un alivio en mi cuerpo. Al menos sabemos que ya están siendo atendidas.



Dakota’s POV:

Abrí los ojos poco a poco viendo un poco borroso. Fruncí ligeramente el ceño al sentir un poco de dolor en distintas partes de mi cuerpo mientras escuchaba el electrocardiograma sonar a menos de un metro de mí y sentía el oxígeno fluyendo en la parte de mi nariz y boca. Cerré los ojos moviendo la cabeza ligeramente para volver a abrir los ojos para aclarar un poco más la vista.

¿Dónde estoy?

Miré la habitación en la que estaba y al parecer estaba en el… ¿hospital? ¿Qué hago aquí? Estaba entre cuatro paredes de color azul pastel, observé mi cuerpo y noté que tenía una bata blanca que estaba arriba de mi ropa cubierta por una manta azul, mis brazos tenían unas bandas adhesivas sobre diversas partes de estos. Tenía una pequeña manguera en el pliegue anterior al codo alcé la vista y al parecer estaba conectado al suero. Intenté alzar mis brazos pero fallé en el intento al sentir el dolor. ¿Qué coño me sucedió? No lo recuerdo…bueno solo está un poco distorsionado.

Recuerdo que estábamos huyendo de una camioneta blindada y que de repente desapareció. Apareciendo sorpresivamente por el lado izquierdo dándonos un golpe haciendo que chocáramos. Además de que Hannah era la que…mierda, Hannah. ¿Cómo está? ¿Dónde estará?

Miré la ventana que estaba de mi lado izquierdo que estaba cubierta por unas ligeras cortinas, pero se notaba que era de noche y que estaba lloviendo.

Me sobresalté un poco al escuchar el chirrido de la puerta. Mis ojos se posaron en la persona que entró. Era un hombre con un pasamontañas de color negro, con unos guantes y ropa negra también. Santa mierda, ¿quién es? Tomó una tabla que colgaba de la camilla, al parecer leyó lo que decía en esta. Se acercó a mí quitándome la mascarilla de oxígeno, antes de que pudiera articular palabra alguna colocó un pañuelo sobre mi boca.


Al inhalar sentí un olor demasiado fuerte, joder, reconocía ese olor…era cloroformo. Comencé a oponerme pero no podía moverme ya que todo me dolía, me removí sintiendo como poco a poco los efectos surgían en mí. Comenzó a quitarme las cosas de mi cuerpo, quitó la manta que me cubría para cargarme con fuerza alejándome de la cama. Sentía mi cuerpo ligero demasiado ligero. Mierda, voy a desmayarme en unos minutos. Tenía la mente en blanco no tengo ni puta idea de que está pasando. 

Adrenaline.Where stories live. Discover now