Adrenaline.

Capítulo 33: ¿Has escuchado la frase...?

Abrí los ojos aún con la vista un poco borrosa, sentía que estaba moviéndome, aclare más mi vista y me di cuenta de que estaba en una camioneta. Mi boca estaba cubierta por un pañuelo, mis brazos se encontraban hacia atrás, por lo que sentía, estaba sujetados por una cuerda. Cerré mis ojos con fuerza por el dolor punzante en mi cabeza, malditos tranquilizantes y sus reacciones secundarias. Miré hacia la persona que conducía y era un hombre, el cual iba acompañado por otro también, ambos estaban armados. 

Harry.

Al recordar su nombre, miré todo mí alrededor y no había rastros de él. A mi derecha estaba la puerta trasera de la camioneta pero con mis manos amarradas por esa puta cuerda es inútil escapar, además no lo haría sin Harry. Joder, ahora que recuerdo, ¿dónde están los demás? ¿les habrán hecho daño? ¿por qué lograron escapar con nosotros? ¿dónde está Harry? Miles de preguntas rondaban por mi cabeza, mientras que la camioneta seguía en movimiento a quién sabe a dónde. Pasaron otros diez minutos así, con esa maldita intriga hasta que el sueño volvió a llegar a mí. 

**

La camioneta se detuvo de golpe. Abrieron la puerta trasera haciendo que mis ojos se cerraran un poco por la luz que entró, me jalaron bajándome de la camioneta. Al fin volví a sentir el suelo.

Alcé la mirada y vi a otra camioneta bajando a Harry, estaba igual que yo, solo que él estaba esposado y golpeado. Malditos hijos de puta, no me imagino que cosas le hicieron pero conociendo a Harry creo que se opuso demasiadas veces. Realmente, no podemos poner resistencia alguna, estamos más que asegurados y vigilados por esos imbéciles. Harry me dio una mirada rápida, indicándome que todo estaría bien. Al verlo así, definitivamente no me siento bien. 

Estoy segura de que los demás hicieron lo posible por ayudarnos pero lamentablemente algo lo evitó. Me preguntó de nuevo si les hicieron daño, solo espero que cada uno de ellos esté bien. Somos parte de la policía, tienen que encontrarnos, tienen…todo el equipo necesario.

Me jalaron para seguir caminando, miré hacia el frente y era una especie de bodega como donde capturamos a James. Por cierto, hablando de ese maldito espero que se vuelva a pudrir en la cárcel.

Caminé hacia la bodega, abrieron la puerta, nos metieron a esta donde había dos sillas en medio. Me acercaron a una de estas, sentándome y amarrándome a la silla. Harry volvió a oponerse y recibió otro golpe, resignándose dejo que lo sentaran y lo amarraran ahora con cuerdas.

James apareció en frente de nosotros, lástima que sea atractivo. 

‘‘Hola Dakota’’ Sonrió ‘‘Lamento tenerte en ese estado, pero era la única manera’’ Hizo una pausa para mirar a Harry ‘‘Hola Harry’’

Miré a Harry quien solo miraba furioso a este. James estaba vestido con unos vaqueros y una camisa de color blanca con las mangas arremangadas. ¿Cómo puede estar tan tranquilo? Acaba de escapar de la cárcel, lo estarán buscando. 

‘‘Bien…se han de estar preguntando demasiadas cosas. Primero, los tengo aquí los dos porque ustedes fueron los principales en cabrearme’’

Alcé una ceja. 

‘‘Sí, Dakota también lo hiciste. Pero, principalmente tu noviecito’’ Lo señaló ‘‘Así que, tú serás mi venganza’’ 

Ya sabía a lo que venía esto. James dijo que quería divertirse conmigo cuando lo conocí, pero como Harry se lo impidió ahora quiere vengarse haciéndome algo en frente de él. 

‘‘Quítale el pañuelo a la chica, por favor’’  Sentí que alguien se me acercó y me quito el pañuelo dejando mi boca al fin en libertad.