¡Eres mío! ¡Solo mío! [Blackice]

¡Me perteneces!

-Pov Jack-

—¿Qué quieres que haga? —la verdad no sabía que demonios se hacía en estos casos, Pitch estaba a mi merced y era un paso importante, pero que se supone que debía hacer.

Debía iniciar un juego previo... o solo debía dejar que lo pusiera en mi, ¡No! definitivamente me inclinaba por el juego previo.
No es que quisiera retrasar la penetración, todo lo contrario, quería sentirlo dentro de mí, pero aún así; no estaba dispuesto a comenzar andar en silla de ruedas.

—¡Jack! —Pitch me sacudía con un poco de brusquedad. Pose la mirada en su hermoso y jodido sensual abdomen —- Oye, deja de verme tan lascivamente —me acerque y acaricié su abdomen.

Pitch me miraba como a un niño, jugando carritos en el abdomen de su padre.

—¿Qué tal si tocó aquí? —baje mi mano hasta su entrepierna, hice lo mismo que él había hecho antes conmigo —. ~Aaahh~ mierda...me sorprendiste.

Tenía que comprobar si de verdad solo lo había sorprendido. Di un ligero apretón — Jack...espe..ra..~Aaah~ —nuevamente hizo hermosos sonidos.

Me incline y este colocó su mano sobre mi cabeza —. Espe...~Mmm~ —comencé a lamer esa parte por encima de su pantalón.

—Mal...maldito...moc ~Aaahh~...vas deprisa —empujó mi cabeza hacia atrás. No me importo y desabroche su pantalón para poder sentirlo más.

Comencé a succionar la punta, rodeé su falo con mis manos; sentir su palpitar, me hacía agua la boca. La sensación era tan buena que no quería dejar de chupar mi caramelo.

El miembro de Pitch daba pequeños espasmos. Seguí sin importar que me pidiera parar —. ¡Basta! —grito, utilizando su polvo de pesadillas en mi. Varias sombras de manos sujetaban mi cuerpo contra la cama.

Trate de moverme, pero fue inútil; estaba siendo sujetado firmemente a ella.

Deje de forcejear y me enfoque en Pitch —. ¿Qué? ¿acaso soy muy caliente para tí? —arque mi espalda para lucir más apetitoso.

Logré mi cometido ya que Pitch se abalanzo sobre mí —. Tenía planeado ser suave contigo —arranco mi polera, dejando mi torso al descubierto —. Vas a pagar el ridículo que me hiciste hacer.

Me besó intensamente. Mis manos pedían explorar su cuerpo, trataba desesperadamente de soltarme del agarre al que me había sometido —. Ah no...no podrás tocarme otra vez, creó que fue suficiente de mí.

—No lo fue —volvió a besarme con más deseo, más lujuria.

—Por favor...libérame —rogue, perdido en el éxtasis. Negó en un movimiento de cabeza.
Comenzó a bajar mi cremallera lentamente, metió su mano dentro y comenzó a jugar con mi miembro.

—~Aaaahh~ —Pitch sonrió maliciosamente. Su vaiven tomo mas fuerza —. ~Aaah, Pitch~ —la fuerza con la que me masturbaba, me estaba llevando a terminar.

Unos cuantos vaivenes fueron suficientes para hacerme correr. Mis piernas estaban temblando, mi respiración era agitada y mi cuerpo estaba muy caliente.

Tomó un pañuelo y limpio su mano —. Eso es todo Frost —sus pesadillas se habían ido ya.

—¿Qué? —pregunté aún tratando de controlar mi respiración.

—Dije que es todo —se dejó caer a un lado mío. Mantuvo la mirada sobre el techo y cerró los ojos —. No tengo ganas de responder a ninguna de tus preguntas...así que vuelve mañana o cuando te de la gana.

le mire con recelo, como se atrevía a dejarme así. No tenía planeado irme aún, así que comencé a bajar mi pantalón junto con mis bóxer. Me coloqué encima del miembro de Pitch y comencé a restregar mi trasero en el.

—Dije que terminó —Pitch colocó su mano en mi muslo, lo frotó como si tratará de encontrar algo.
—¡Que demonios! —abrió los ojos, sonrojándose al verme desnudo.

—¿Qué haces? —tomo una almohada y la coloco en mi intimidad.
—Quiero que termines —volví a restregar mi trasero contra su pene.

Pitch arqueo un poco su espalda, sonreí pícaramente al ver que su amiguito respondía.
—Para —tomo mis caderas y me detuvo.

—¿Porqué? —pregunte, extrañado.
Quitó la almohada que había puesto antes y tapo su rostro con ella.
—Yo...no quiero hacerte esto.                                                                                     
—De acuerdo —baje de encima suyo, le mire con odió y volví a ponerme los bóxer y pantalones —. Deberás cumplir. Si el trato no se sello fue por qué te negaste a último minuto.

Este quitó la almohada y se recostó de lado para verme —. Te enojaste por qué no quise follarte —se volteó hacia la pared, dándome la espalda.

—Eso te hace ser un niño, por eso no hice.
—¡Vete al diablo Pitch! —busque mi polera, pero solo quedaban pedazos de ella —Vez...ahora tendré que irme desnudo y todo es tu jodida culpa.

Pitch río divertido —. No me digas que morirás de frío.
—Púdrete —tome mi bastón y me dispuse a salir de allí.

—¡Esperaré la llegada de tus amigos —dijo en un tono burlón. Esa actitud me hacía odiarlo y amarlo al mismo tiempo.

Sacudí mi cabeza, tratando de calmar mi mente —. ¡Yo no soy así! —antes de llegar a la salida de la cabaña, mire hacia atrás, quería que Pitch estuviera viniendo por mí, pero el muy idiota no lo estaba haciendo.

—Que idiota —dije entre dientes —.¡Mañana estaré de vuelta¡ ¡y está vez conseguiré lo que quiero!  

No recibí respuesta, salí volando de allí. No podía creer que Pitch dudará de mi amistad con él, digo, si es que se le puede llamar "amistad".

Eso no importaba, lo que importaba era que estaba al lado de Pitch y no dejaría que este me apartará tan fácilmente.

Tenía que tenerlo para mí, debía ser mío, debía conocer todo de él y compartir su dolor conmigo; me debía pertenecer solo a mí...y lo iba a lograr, lograría hacer que Pitch se doblegara ante mí.

—Solo espera Pitch.