ᥴꪖρⅈ𝕥ꪊꪶꪮ 9

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- lo voy a repetir - hablo molesta, tomo aire y volvió a decir la misma pregunta - ¿¡QUÉ HACE UN MALDITO HOMBRE EN LA HABITACIÓN DE MI HIJA!?

- Calíope... - pronunció Freyr al ver a su esposa, parándose del suelo, para luego dirigirse hacia ella - querida no sabía que vendrías hoy

- ahorrate la cursileria Freyr - hablo seca caminando a paso pesado y molesto, hasta estar dentro de la habitación de su hija - Kamir...

- solo hablamos mamá - se excuso tranquila - no pasó nada

- no te creo cariño - sonrió con alegría cuando en verdad, daba un aire de terror a lo que los invitados se estremecieron. Contando una excepción - hay un hombre en esta habitación - señaló al rubio - y yo sepa no estas casada y ¡EN ESTA PUTA HABITACIÓN NO PUEDE ENTRAR HOMBRES QUE NO SEA TU PADRE O HERMANOS!

- ya lo sé mamá, ya lo sé - trato de calmarla - madre, él es Poseidón

- ¿eh? ¿Quién? - confundida se dio la vuelta mirando con desagrado al hombre rubio - igual es macho y no quiero que se te acerque

- Calíope, dejame te explicamos todo con detalle, antes de que haya otra guerra - interrumpió el padre de Kamir - tenemos mucho que decirte

- ya vaya que si - dejó que su esposo la llevara fuera de la habitación, no sin antes dar un último ojo a su hija y compañia - más te vale no ponerle un dedo ensima

Dicho aquello, ella se fue al lado de su esposo y aquellas visitas dejando nuevamente a Kamir y a Poseidón solo en la habitación. Calíope tiene cabello castaño y ojos grises tal cual son los de Kamir, el rubio pudo ver que su "amiga" en parte se parecía a su madre, solo que la progenitora de la diosa tenía más aires autoritarios, temerosos y asesinos, eran más fuertes que los de Kamir, pero había diferencia notoria ante ambas mujeres, solo era de separarlos para ello.

- ahora entiendo de donde sacaste lo fastidioso - le dijo mientras cerraba la puerta y urgaba los libros de las estanterías

- es sobre protectora - respondió mientras tomaba un libro que estaba puesto en su cama - desde que empezó este problema, no ha dejado que me acerque a hombres que no sea de la familia

- ridículo - respondió mientras leía - puedes cuidarte sola

- primero me dijiste mujer estúpida, luego de que actuó como niña y ahora que si me se cuidar sola, ¿tan rápido cambias de opinión? - rio por lo bajo

- estúpida e infantil sigues siendo, lo que sucede es que los estúpidos como tu sobreviven de alguna forma - defendió, al cambiar de página, sintió algo suave caer en su cabeza y luego al suelo, dirigió su vista a aquello dándose cuenta que era una almohada que la contraria había lanzado - tonta - le devolvió el objeto lanzando lo hacía ella

- mira quien habla - le tiró de vuelta la almohada

Poco a poco, la almohada iba de lugar en lugar, casi con más fuerza que antes empezando un el juego de la pelea de almohadas, en si no fue por molestar ni nada por el estilo, Kamir quería saber si su acompañante sentiría lo que era divertirse y por un momento pensar en felicidad y no en un deber o una obligación, aunque el rostro del dios del mar era inexpresivo quería sentir la sensación de que le gustaba ese juego, pero no podía indicar en aquello que apenas conocía. Seguían lanzando la almohada de un lado a otro hasta que Poseidón, la tiró con mucha fuerza, haciendo que la azabache callera acostada en la cama dando un leve brinco y aterrizar en esta, el ojos azulados al ver que ella no se levantaba para devolver el objeto se hizo preguntar si fue demasiado rudo para ella, dio dos pasos y se detuvo en seco al escuchar como ella empezaba a reír de una forma graciosa, la ojos grises se levantó aún con grandes risas saliendo de su boca y rostro tan feliz, Poseidón no le vio lo divertido al echo de que pensó que por poco y le hacía un golpe, se acercó a ella con fastidio por haberle echo pensar de que le había echo algún daño.

𝐔𝐍𝐀 𝐄𝐒𝐏𝐎𝐒𝐀 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐔𝐍 𝐓𝐈𝐑𝐀𝐍𝐎 ❛𝑷𝒐𝒔𝒆𝒊𝒅𝒐𝒏❜  SNVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora