Sabía que ella sería su perdición, aún así la protegería aunque le costara su propia vida.
Volver a enamorarse, después de todo lo acontecido, llegará Amélie Malfoy a amar a quién fue solo una amiga.
Un matrimonio arreglado ¿ qué podría salir mal?
E...
Había llegado la noche, papá estaba nervioso y mamá no quería que hiciera esto, Draco había ido con Amy a casa de Astoria.
— Hija, sabes que no tienes otra opción, Rosier no quiso tomar la marca y eso la perjudica a ella, y si tú no la tomas nosotros pagaremos las consecuencias — dijo mi padre
— No, padre ahora no, no me vengas a decir que no tengo opción, de eso te encárgaste tú, ahora si hago esto lo haré por mamá, Draco y Amy, y tú te puedes ir al mismísimo infierno — dije mirándolo fríamente.
— Hija — susurró mamá
— Me entregaste como un sacrificio, que esperabas que estuviera feliz, pude morir y eso a ti no te importó — dije señalándo a mi padre
— No te iba a matar, no entiendes, ni entenderás porqué lo hice — dijo enojado, mientras mi madre lo veía con decepción
Después de 10 minutos Voldemort llegó envuelto en una niebla de color negro.
— Señor es un honor — decía papá nervioso
— ¿Dónde está la chica? — dijo él ignorándolo por completo, y enfocando sus ojos en mí.
— Ven acércate — dijo él tendiendo su mano — Has tomado la decisión correcta —
— Bien — dije deteniéndome frente a él — Pero tengo una petición —
— ¿Qué haces? — dijo papá enojado
— Silencio Lucius — dijo Voldemort mirándome con una sonrisa Sádica — ¿Cuál es tu petición? —
— Me uniré a tus filas, pero tú ni tus lacayos lastimaran a Amy, no la obligarán a tomar la marca, Draco quedará fuera de esto y no lastimaran a mi madre ni a Hermione Granger — dije mirándolo fijamente
— La hija de muggles, está bien — dijo el — ahora dame tu brazo —
— No confío en que tus lacayos cumplan su palabra — respondí
— Un juramento inquebrantable te parecerá suficiente — dijo él — Lucius ven — llamo a mi padre para luego entralazar nuestras manos.
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— Bien, Amélie comienza — dijo mi padre
— ¿Jura que usted, ni ninguno de sus sirvientes lastimaran a Amy Rosier y que tampoco será obligada a tomar la marca ni a ella ni a Draco, no le harán daño a mi madre, ni tampoco lastimaran a Hermione Granger sin importar motivos o circunstancias? — Dije, mientras mi padre posaba su varita sobre nuestras manos.
— Lo juro — dijo y un pequeño hilo de luz salió de la varita, sellando el juramento.
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