Inconmensurable (Hermione Granger)

Capítulo 32: Creí que habías muerto

— Amélie — escuché en un susurro

Abrí mis ojos lentamente, y vi a Hermione a mi lado.

— Hola — dije en un murmuro

— Amélie — grito Hermione y se abalanzó sobre mí provocando que mi abdomen doliera y que soltara un leve quejido.

— ¿Cómo estás? —pregunté

— Ten, primero toma agua — dijo ella dándome agua — Estoy bien, en parte gracias a ti, Harry me contó lo que hiciste ¿Es cierto que hiciste un trato con Voldemort para mantenerme a salvo? —

— No quería que lo supieras, hice un trato si, el juramento inquebrantable, pero se rompió cuando Amy murió, y luego Voldemort me dijo que el trato aún incluía a más personas a mamá, Draco y a ti, y si yo rechazaba estar en su bando, tú quedarías desprotegida, aunque después de esto no sé que va a pasar, es decir deje sola a mamá y Draco — dije intentando levantarme

— Tienes que recuperarte — murmuro dándome un beso en la frente — Iré por Fleur —

Al rato Fleur, Bill, Dobby y Luna aparecieron saludándome, Fleur revisó mi herida que ya estaba mejor, y me dijo que llevaba varios días inconsciente.

Los días pasaron ahora estábamos en la mesa cenando, Harry y los demás estaban hablando, no les prestaba atención mientras mi mente solo se preocupaba por mamá y mi hermano, se oyó un fuerte golpe en la puerta de la calle, todos apuntamos las varitas hacia la puerta

— ¿Quién está ahí? — gritó Bill.

— Soy yo, Remus John Lupin, soy un hombre lobo, estoy casado con Nymphadora Tonks, y tú, el Guardián de los Secretos de Él Refugio, me revelaste la dirección y me instaste a venir aquí en caso de emergencia —

— Lupin — murmuró Bill, y corrió hacia la puerta para abrirla de golpe.

Remus miró a todos lados y gritó — Es un niño, le hemos puesto Ted, como el padre de Dora —

— ¿Qué? Tonks ha tenido al bebé? —  Grito Hermione

— ¡Sí, sí! ¡Ha tenido el bebé! — gritó Lupin.

Todos felicitaron a Lupin, me acerqué dándole la mano a Remus — Felicitaciones — murmuré — Mis mejores deseos para Dora, Ted y para ti —

— Gracias, es maravilloso es un niño — repitió Lupin agarrándome en un abrazo arrastrándome hasta donde estaba Harry a quien también abrazo

— ¿Querrán ser los padrinos? —  pregunto

— ¿Yo…? — balbuceó Harry

— ¿Qué? Hablas en serio — murmuré

— Sí, sí, ustedes Dora está de acuerdo, no se nos ocurre nadie mejor, Dora te quiere mucho Amélie —

— Está bien supongo — murmuré algo aturdida

— Pues… sí, claro. Vaya… — dijo Harry

Bill fue a buscar vino y Fleur intentó convencer a Lupin para que se quedara a brindar con nosotros.

— No puedo quedarme mucho rato, tengo que regresar — dijo Remus — Gracias, gracias, Bill —

Bill no tardó en llenar las copas a todos, todos alzamos las copas.

— Por Teddy Remus Lupin — brindo Remus — Un gran mago en potencia —

— ¿A quién se paguece? — preguntó Fleur.