16-- Buzón.

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El amanecer llegó mas pronto de lo que les hubiera gustado, los rayos del sol no habían caído con gracia sobre sus rostros como lo hacia de costumbre después de haberse consumido en una noche de pasión. 

Y sólo eso les dio la señal de que hoy no marcharia tan bien como lo habian pensado. Eso y la carta en el buzon de la entrada , cual si hubieran revisado algunos dias antes podrian haberse preparado.  Suran, esa mujer los queria llevar al juzgado para la custodia del niño, esa vivora tenia el descaro de exijir tal cosa como si hubiese estado presente en esos ultimos años y en en estos otros donde junto a jimin lo habia estado criando.

Por lo que la ira no cabía en Min Yoongi, siendo tan notorio por el amargo y ácido aroma presente en la habitación, pareciendo que esto lo consumía todo. Jihyun por su parte estaba tranquilo en su habitación,  jugando con algunos bloques. Jimin se encontraba en la cocina preparando el desayuno,  su nariz le picaba debido a las altas feromonas de un alfa enojado, cosa que le estaba sacando de sus casillas por parte de su alfa,  pues era bien sabido que el aroma de un alfa enojado podía afectar a otro que estuviese cerca.

Por lo que con la poca paciencia que le quedaba se acercó hasta su pareja. Tomándole del rostro con ambas manos.
¿Podrías bajar un poco tu acidez Min?, La nariz me está picando desde que abriste el buzón, me puedes decir que carajo fue lo que hay?— habla con la voz de mando, siendo su lado alfa y primitivo el que estaba hablando.

Busca los ojos de su pareja y más que enojo, nota la preocupación en el iris de este. Toma el papel que tiene entre sus manos y es ahí cuando todo enojo desaparece. Es cuando entiende el porque de la acidez en el aroma del pálido.
— ¿Cómo se atreve?, ¿Y porque justamente ahora?, Han pasado más de tres años para que ella haga esto. Si en su momento no te reclamo nada, ¿Porque ahora sí?— cuestiona el más joven de ellos , su entrecejo está arrugado, no entiende el actuar de la Omega.

¿A esto se refería aquella vez que vino a casa?, Esa vez cuando intenso arreglar las cosas con Yoongi, cuando regreso exigiendo cosas a las que no tenía derecho.

— No lo sé, no lo entiendo, pero no sé lo voy a dejar fácil Jimin... Tenemos que hacer algo antes de ir al juzgado... Se que puede que parezca algo precipitado pero... ¿Te quieres casar conmigo?— cuestiona el alfa pálido, Min Yoongi nunca había estado más seguro de ello. Todos estos años que han estado juntos, han sido prueba suficiente de que es con el menor con quién quiere compartir hasta el último de sus alientos.

Jimin lo mira con los ojos muy abiertos, pues no era algo que se esperaría. Soltó una risa un poco ruidosa, pues pensaba que era el único que había pensado en ello. Y pensaba en pedirle matrimonio justo después de la boda.
— Hyung, estaba por pedirte lo mismo.— Yoongi le mira con diversión y suelta una suebe risa.  — ¿Entonces es un si?— le susurra , Jimin asiente y en cuanto menos lo espera tiene los finos labios del pálido sobre los suyos, los cuales gustoso recibe y envuelve con los propios.

Sus ojos se cierran por mera inercia y su mano sube a la mejilla del alfa pálido, dejando suaves caricias en esta. Al separarse se miran por escasos segundos, sus frentes reposan una contra la otra y un suave suspiró sale de ellos.

La preocupación sigue ahí, pero el peso es menos, saben que se tienen, que no hay barrera que no puedan pasar juntos.
Se sienten en su piel, como un lazo que palpita por lo bajo, muy tenue pero está presente.

Y eso es suficiente para ellos.

— Deberíamos ir a cambiar los apellidos de Jihyun... ¿Sería bueno hacerlo antes de la boda o después?— consulta Yoongi, quién de un momento a otro se acomodo contra el fornido cuerpo del alfa a su lado. — Ya sabes que nos va a tomar un tiempo hacer la boda, tenemos que hacer papeleo y apartar una fecha en la delegación. O bien podríamos hacer una recepción solo para nosotros. Algo sencillo.— responde Jimin.

— Igual podemos ir viendo lo de Jihyun, antes de que estemos en el juzgado con Suran.— dice Yoongi finalizando aquello.
Jimin se queda pensativo, tratando de buscar una pronta solución.  —Podemos ir mañana, masó menos tarda tres meses en hacerse, pero mi hermano trabaja en el registro civil, tal vez nos pueda ayudar si le explicamos.— Yoongi asiente y sin más se levantan de aquel sillón, el pálido alfa yendo a la habitación con su hijo y Jimin sirviendo el desayuno en la mesa.

Muchos podrían decir que tomaba el lugar de Omega por las cosas domésticas, pero en realidad Jimin siempre había disfrutado de ayudar a su madre en la comida y los quehacer. Siempre le vieron como alguien raro por no ser tan imponente como otros alfas.

Sin embargo no le daba atención a ello, él era como era y eso no lo cambiaría nunca. Pues era esa misma esencia lo que lo hacía ser su persona, ser ese alfa que siempre irradiaba amabilidad y confianza. Era ese sol que salía luego de una tormenta.

— Ya está listo, ¿Vienen a la mesa?— anuncia, pronto los pasos de Jihyun son escuchados, quién corre hacia si cuerpo y le abraza las piernas, estirando sus brazos hacia arriba poco después. — Papá Jimin, levanta.— dice, pues son pocas las palabras que logra decir. Jimin no tarda en cargar al cachorro en brazos, Jihyun frota su mejilla contra la del alfa, haciendo que este último suelte un bajo ronroneo de gusto. — También te quiero cachorro.— deposita un beso en la mejilla y pronto se escucha el flash de una cámara instantánea.

Siendo Yoongi quién la sostenía con una sonrisa amplia en sus labios.
Pues amaba atesorar aquellos momentos donde convivían como familia, donde se sentía seguro y nada más que eso valía toda la pena del mundo.

Pues teniendo a Jimin el miedo se iba. Y la esperanza y la felicidad hacian pasó su vida.

— ¿Y bien?, ¿Quién quiere comer?—

Y aquel almuerzo se sintió diferente al de todas las mañanas, sentía el corazón tibio y el alma solo un poco destrozada. El temor de que Suran se llevará a Jihyun meramente le aterraba.

Terminando todos el almuerzo, Jihyun no tardó en tomar la siesta en la sala. Ambos mayores se quedaron en el comedor, Jimin poniendo su mano sobre la del pálido, dejando un apretón sobre está.
— Tranquilo Hyung, estoy seguro de que podemos con esto y más, siempre lo hemos hecho. Así que no temas, ¿Si?— le reconforta, Yoongi asiente y devuelve el apretón en la mano del menor.  — Lo sé, es solo que es Suran... Y la conozco. Es posible de hacer todo un lío grande.— suspira. Y la charla termina ahí, Yoongi se levanta para ir por su cachorro, tomándolo en brazos para llevarlo a su habitación, donde se recuesta sobre la cama, abrazándolo sin apretarlo.

No tarda en quedar dormido.

Jimin recoge la mesa y hace el poco aseo que había que hacer, no siempre es así. Suelen hacer las cosas juntos, pero entiende que el mayor se siente abatido.

Por lo que cuando entra a la habitación, siente el respirar tranquilo del Alfa, se acerca para acomodar su flequillo y deja un beso sobre su frente, haciendo lo mismo con Jihyun. Se aleja para descalzarse y apaga la luz, yendo a acomodarse detrás de Yoongi. Le abraza y besa su nuca para posteriormente cerrar sus ojos.

Merecían un descanso antes de que la tormenta cayera sobre ellos.

Alfa Melancólico.Where stories live. Discover now