──── 𝕻𝖗𝖔𝖑𝖔𝖌𝖚𝖊.

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HOGWARTS, Lago Negro.

El Lago Negro estaba solitario, no se escuchaba ninguna risa como las que se podían presenciar en el Gran Comedor mientras los estudiantes disfrutaban de su almuerzo; y Lola estaba agradecida de eso.

Se encontraba allí, con sus piernas pegadas al pecho, la espalda apoyada en un gran tronco de un árbol a orillas del lago y con algo específico entre sus manos.

Un girasol.

El único que pudo encontrar de camino al sitio prácticamente abandonado en ese momento.

Admiró sus pétalos de un color amarillo intenso que se podía mezclar un poco con el naranja, su tallo enorme que ella tuvo que cortar para poder llevárselo; le pidió perdón por eso.

Creyó que había sido absurdo pedirle perdón a una planta, pero lo vio algo necesario si quería conservarla. Porque ella amaba esa flor, podría tener muchas acumuladas en un solo florero.

Y de hecho, en la habitación que compartía con Némesis, ya había uno.

Este era el segundo, y esperaba después ir en busca de más.

—Vaya... no esperaba encontrarla aquí, señorita Windsor.

La chica cerró los ojos ante esa voz masculina que con el pasar de los días se volvía cada vez más familiar.

Le hizo sonreír además, y giró su cabeza hacia la izquierda para encontrarse a Harry vestido de un abrigo largo, caminando tranquilamente en su dirección.

—Al parecer ninguno se esperaba encontrar al otro. —se encogió de hombros, olvidando por unos momentos de la flor— ¿También le gusta venir a este lugar?

Lo vio asentir, deteniéndose a unos metros de la chica para observar el lago tan sereno. Metió las manos dentro de los bolsillos de su abrigo, y se quedó en esa posición, disfrutando del ambiente fresco.

—La verdad es que sí. Supongo que ahora me di cuenta de que es ideal para aclarar la mente... cuando estudiaba aquí nunca lo aproveché.

Lola suspiró. —Lo es... no hay mejor lugar que éste.

Harry le dio la razón, asintiendo nuevamente y soltando una risa que llenó los oídos de Lola.

No entendió por qué, pero le pareció algo muy atractivo en él... consideraba que todo él lo era, y no por conocer su pasado siendo 'el elegido'.

A ella le atraía sólo por ser él.

—Es muy bonita.

Sus palabras la descolocaron completamente, y en cuestión de segundos ya tenía sus mejillas ruborizadas por aquel cumplido.

SUNFLOWER | Harry PotterWhere stories live. Discover now