Gorgeous | Max Verstappen [En edición]

09. Llámame Augustine

[POV Max]

Desperté cuando Atenea se removió a mi lado, la chica castaña de pelo corto, seguía profundamente dormida a mi lado, se veía hermosa a pesar de que tenía la máscara de pestañas corrida por los ojos.

Tomé mi celular mientras revisaba las notificaciones que tenía, contesté mensajes en el grupo familia y después de algunos minutos viendo Instagram, una videollamada entró.

Era Kelly.

Me puse de pie rápidamente y corrí hacia al baño, abrí la llave de la ducha y contesté, su cara apareció en la pantalla del celular, sonreía, estaba sentada en el sofá, la pequeña Penélope posiblemente jugaba en la alfombra frente a ella.

— Hola Max, ¿cómo estás? — preguntó chica que todo el mundo conocía como mi novia.

— Con resaca, estaba por ducharme — mentí.

— ¿Qué tal la celebración? —

— Bien, fue una locura. Lo mismo de siempre —

— Si, me imagino — sonrió — pensé que sería bueno en aprovechar tu estancia en Brasil para conocer a mi padre, ya sabes, hacer esto más realista. Además, te hemos extrañado mucho.

— ¡Eso es increíble! ¿Entonces te veré en Brasil? — pregunté ansioso por terminar la llamada.

— Si, pasaremos algunos días con mi padre. ¿Te parece bien? —

— Sí, ese suena genial. Hoy sale el vuelo, pero no sé a qué hora, cuando lo descubra, te mando un mensaje. —

Después de terminar la llamada con Kelly, aproveché para ducharme, cuando salí con una toalla alrededor de la cintura, la cama estaba vacía. Atenea se había ido, y no la culpaba, estaba siendo un completo imbécil con ella y no lo merecía, ni mucho menos Kelly después de todo lo que había pasado con Daniil.

Quería muchísimo a Kelly, pero no como ella deseaba, me había bastado con pasar unos minutos con Atenea para descubrir algo nuevo sobre ella, sus chistes malos, sus expresiones, sus sonrisas contagiosas que eran capaces de poner de buen humor a cualquiera, sus ojos cafés y la forma en la que me miraba, la forma en que me miró la noche anterior, todo sobre ella resultaba fascinante.

Tomé mi celular, busqué su número y marqué, pero me mandó a buzón, aventé el celular en la cama y me dediqué a recoger mis cosas.

***

Durante el vuelo a Brasil estuve tratando de hablar con Atenea, pero ninguna llamada fue atendida, deseaba contarle cuáles eran las verdaderas razones detrás de mi relación con Kelly, pero no encontraba las palabras para expresarlo sin parecer un idiota.

Cuando llegamos a Brasil, lo primero que haría sería tomar el jet del padre de Kelly para trasladarme a su casa, donde estaría quedándome por la siguiente semana hasta dirigirnos a Catar.

Al bajar del jet, Kelly me esperaba junto con su familia, pude ver a Penálope en los brazos de Nelson Jr., el hermano de mi novia; ella se abalanzó sobre mí y me dio un beso en los labios ante la presencia de algunos periodistas, al cerrar los ojos, la imagen de Nea se cruzó por mi cabeza, serían días largos sin ella.

[POV Atenea]

Me despedí de mi abuela y mis amigos para subir al avión que me llevaría a Brasil, mi celular no había dejado de sonar desde la mañana, estuve a punto de bloquear el número del holandés que no dejaba de llamar, siendo sincera, no quería hablar con él, en primera porque desde el día anterior me había convertido en la Augustine de la historia de James y Betty como en la canción de Taylor Swift y ni siquiera podía con mi propia miseria por ser tan idiota, y en segunda, sabía que bastaría con escuchar su voz para hacer lo contrario a mis principios.