My teacher | Rubius «1»

Capítulo 25.

'¿Y que pasa con los angeles?'

♥Leer la ultima nota es importante, girls.

Los meses habían pasado, iba a mi control como el doctor lo había dicho, ahora tenía 7 meses de embarazo, mi veinte era notable, demasiado.

No sabía nada de Rubén.

La verdad ya no importaba, pronto tendría a mi bebé y me iría a Inglaterra por un buen tiempo, estudiaría idiomas como Jossy lo había hecho pero en cambio yo me iría a Inglaterra, exactamente a Brighton en la costa sur de Inglaterra. Estaba algo emocionada por todo lo nuevo que se venía, el parto, mi gran cambio, mi nueva carrera, una nueva ciudad.

Era emocionante.

Mi madre había apoyado mi decisión en todo momento, de hecho creo que estaba más emocionada que yo, no lose. Aunque ella por una parte estaba triste de que le quitara a su nieta tan rápido.

¡Oh! No lo había dicho, era niña.

Estaba pensando aún el nombre.

Quizá se llamaría Lana, o Emma o Marian, quizá también se llamaría Bárbara.

Era muy difícil escoger un nombre y más si era una niña. Aun no sabía si llevaría los apellidos de Rubén, aunque creo que no, supongo que llevaría los dos míos... ¿Eso se podía? No lo creo.

Rubén, él ya no había dado señales... Quizá estaba muerto, quizá no. No lose... Le extrañaba mucho, extrañaba ver sus ojos miel brillar y achinarse cuando sonreía.

Pero tenía que vivir con eso, sin él.

Estábamos al mes de Abril, la navidad me la había pasado en casa de mis padres y el año nuevo también, mamá llevaba una muy bonita relación con José que por cierto le había agarrado mucho cariño.

Natalia había dejado a Nathan y había empezado a salir con Jossy, al final de todo esos dos si se traían algo.

Jossy había seguido ayudándome hasta la fecha, me acompañaba a las citas y me compraba lo que necesitaba. Siempre tan amable.

Paola estaba comprometida con Mangel, algo sorprendente.

De hecho ahora mismo me estaba poniendo guapa para ir a su boda. Era un viernes soleado, un muy buen día para una boda especialmente para la de Paola.

-Anda -dijo Natalia mientras veía como metía lo necesario a mi bolso. -Paola ¿ya estás? -le preguntó mientras tocaba la puerta de al lado.

-Necesito que me ayuden -dijo y entramos.

-¿A que? -pregunté.

-Tú siéntate cariño. -me indico, ella se veía tan linda con ese gran vestido de color blanco, su peinado a lo natural pero a la vez lindo y ese maquillaje tan precioso.

-Te vez hermosa, Pao -dije sonriendo.

-Igual que tú con ese barriguita -me dijo y reímos.

Este mes cumplía 18 y estaba emocionada.