༒• 14 •༒

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 Para ser sincera recordaba poco pero mucho de lo que había pasado en la noche, solo recordaba el cómo sus labios recorrían por completo mi cuerpo. Mi piel se erizaba con solo recordar su boca jadear en mi oreja mientras sus dedos...

— Oh, mucho gusto, yo soy Camila —Me quedo estupefacta y no puedo evitar tener flashbacks sexuales al verla.

— Creo que no teníamos el gusto —Me abrazó como si fuésemos buenas amigas—. Gracias por el regalo de navidad —susurra y trato de no actuar de una manera en la que pueda echarme de cabeza. Me suelta y ella comienza a tratar de aclarar los "malentendidos" con los reporteros, por suerte, ahora solo soy observadora de todo lo que está pasando, trato de no ponerle atención, pero mis ojos se desvían al lugar en donde está Hailee, no puedo creer que con todas las personas que pude haber estado anoche, estuve con la sensación de ahora. Ella está literalmente en todas las portadas de la ciudad promocionando su nueva serie.

 Los flashes repentinos hacían que mis ojos se sintieran algo cansados, gracias a Dios la pasarela estaba por terminar, pero era un evento bastante importante, bueno, todos los eventos son importantes, pero este es el de navidad, a cada uno de los que fuimos invitados nos entregan un reconocimiento por nuestro esfuerzo durante este año; no iba a venir, pero este era uno de los eventos en los que Lauren y yo debíamos estar presentes. Honestamente ni siquiera yo sabía qué era lo que tenían planeado para ambas esta noche, solo sabíamos que íbamos a estar juntas, no en la misma mesa, pero sí en mesas vecinas, la mía delante de la suya. Quería mantener la compostura, pero la presencia de aquella chica no me dejaba en paz, no me gustaba, pero tampoco voy a negar que anoche no la pasé bien. Le estoy prestando mucha atención al asunto, concéntrate Camila, no estamos en estos momentos para pensar en otra persona que no seas tú, una persona que está a punto de ser demandada por no cumplir con las cláusulas de un estúpido contrato que te salvará de la miseria. 

 Soy Camila Cabello, debería de estar tranquila, después de todo los rumores son falsos. Maldita sea, por más que quiera convencerme, los nervios recorren por completo mi cuerpo, siento como si en cualquier momento fueran a pasar un vídeo de Hailee y yo teniendo sexo en plena noche buena. 

— Creo que el destino está aferrado a tenernos unidas —separo mi vista del celular y se encuentra ella, tomando una de las sillas para hacer espacio y sentarse a mi lado derecho, parece que es cierto eso de que entre más piensas algo, más lo atraes.

— Oh, hola, ¿cómo estás? —trato de llevar una conversación serena, que no sea objetivo de los camarógrafos del evento o que no llame la atención de nuestros compañeros de mesa.

— Muy bien, de hecho. ¿Y tú, Karla? —Paso saliva al escuchar salir de su boca mi primer nombre y agarro una de las copas que ya estaba servida en la mesa, estoy a punto de tomarla cuando siento una mano reposar en mi hombro derecho.

— De hecho ella está muy bien, pero lamento que tendré que llevármela por unos minutos, tenemos que hablar de unos asuntos pendientes —su voz grave pero femenina hace que mi corazón se tranquilice, aunque eso no hace que mi enojo desaparezca.

 Pido disculpas y desaparezco de la mesa siendo arrastrada hasta el baño por Lauren, en donde me encierra en uno de los cubículos.

— Siéntate —me ordena y no me opongo, era obvio que estaba enojada.

— Lauren, puedo explicarte, yo —me miró fijamente y sabía que era obvio que no quería escuchar ninguna palabra de mi parte. 

— ¿Sabes el problema en el que acabas de meternos? Esperaba que esos rumores fueran falsos, pero al verte hace un momento, me di cuenta de que eran verdad, anoche estuviste con ella. No puede ser, y yo como idiota respetando cada una de las cláusulas del maldito contrato, para que la niña mimada se revuelque con la primer persona que encuentra, y aún peor, con la nueva estrella de Marvel —me estresaba el cómo Lauren estaba dando vueltas en el pequeño espacio que quedaba del baño. Ni siquiera entendía qué era lo que le molestaba, ninguna estaba con la otra en verdad, era cosa de un contrato, no de nuestra relación que ni siquiera existe.

PR ~camrenWhere stories live. Discover now