༒• 17•༒

1.5K 131 4
                                    


— Lo has hecho muy bien, ahora tomaremos un descanso para salir a comer, ¿Quieres que ir a comer con nosotros, Camila? —Preguntó uno de los productores. Negué con la cabeza y agradecí.
Ya tenía una cita con alguien.
Habían pasado ya unas semana desde aquel espectáculo que hicimos Lauren y yo en año nuevo, cosa que ambas tuvimos que aclarar mediante redes sociales que solo se trataba de una broma del día de los inocentes, pero no rendimos cuentas sobre nuestra relación, cosa que había dejado a muchos de nuestros fanáticos con dudas y preguntas. Por el momento ante la farándula, Lauren y yo solo éramos buenas amigas con un pasado en común, cosa que probablemente cambiará pronto, en cambio, mi situación con Hailee se estaba yendo por otro camino.

— Hey, linda, supuse que tendrías prisa, así que me encargué de pedir la comida por ti —se puso de pie y me ayudó con mi silla, cosa que agradecía, pues era un lindo gesto, aunque yo misma podía hacerlo.

— Para nada, de hecho, tengo una media hora —miré mi reloj, por lo que mi vista también se fijó en el anillo que se encontraba en mi dedo anular. El anillo que me había dado Lauren recientemente era bastante parecido al que me dio cuando apenas comenzábamos a salir. 

— Bueno, y... ¿Cómo te está yendo con tu canción? —me agradaba el interés que mostraba, pero a veces sentía que no sabía qué otras cosas preguntarme. Por ejemplo, cuál es mi café favorito o cuál era mi integrante favorito de once direction antes de conocerlos.

— Bastante bien, de hecho, escucha —desbloqueé mi celular y en el inicio de Twitter estaba una selfie de Lauren sosteniendo el pequeño cactus muy cerca de su cara y en su descripción colocaba "Feliz fin de semana" junto con un emoji de cactus, en fin, puse la canción y coloqué un audífono en el oído de Hailee y el otro en uno mío.

— Wow, va quedando muy bien, ¿Cómo dices que se va a llamar? —me parece graciosa la manera en la que mueve su cabeza al ritmo de la canción.

— Eyes on You, era uno de mis viejos demos, creo que es digna de ser parte de mi nuevo álbum. —confesé.

— Bastante digna, yo diría que es genial—me halagaba, mucho, pero la palabra "genial" estaba mucho en su vocabulario. A ella todo le parecía genial, ella era bastante genial, pero tanta genialidad me parecía abrumante.
Comenzamos a comer y honestamente no sabía de qué hablar durante el almuerzo, el silencio era algo incómodo, hasta que el teléfono de ella comenzó a sonar.

— Oh, lo siento, es mi representante —dijo mostrándome la pantalla de su celular.

— No te preocupes, de hecho, comenzaron a llamarme a mí también, tengo que irme, ya es hora, perdón —dije levantándome.

— ¿Quieres que te lleve? —preguntó antes de contestar el teléfono.

— No no, así está bien, gracias por la comida —la tomé de su barbilla con cuidado y besé ligeramente sus labios—, nos vemos en la noche.

No quería que me malinterpretara, me gustaba, pero a veces me sentía ¿Rara?

— Gracias a Dios, Roger, te llamo para avisar que voy de regreso al estudio —abrí la puerta de mi coche y entré, iba a encenderlo, no sin antes verificar que no tuviera ninguna lagaña u otra imperfección en mi cara.

— No soy Roger —escuché su voz y un pequeño espasmo hizo un recorrido de mi espalda baja hasta mi nuca. No me di cuenta de que me había equivocado de contacto.

— Oh, Lauren, hola —salí del estacionamiento para dirigirme de nuevo al estudio— ¿Cómo estás?

— Bien, ¿Y a ti? —en el fondo escuchaba ruido, así que probablemente estaba ocupada.

PR ~camrenDove le storie prendono vita. Scoprilo ora