༒• 18•༒

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  Camila cerró la laptop de manera inconsciente, creyendo que Lauren la besaría en sus labios, pero no fue así, los labios de la ojiverde habían terminado en la mejilla de la ojimarrón.

— ¿Qué acabas de hacer? —cuestionó Lauren abriendo de nuevo la laptop, la cual se había suspendido de manera automática.

— Ya no quiero hacer esto, Lauren, siento que ya no puedo, yo... —Camila se puso de pie y tomó su bolso junto con su abrigo, saliendo del apartamento. De nuevo estaba sola, ni siquiera podía llamar a Hailee por el malentendido que habían tenido. Sin embargo, lo mejor que podía hacer era tratar de arreglar las cosas con ella, quería darle tiempo, pero la ansiedad de Camila no la dejaba pensar en otra cosa. Se dirigió directamente al departamento de la chica y llamó a la puerta, no pasaron cinco minutos cuando la chica le abrió la puerta.

— ¿Qué se te ofrece, Camila? —cuestionó sin dejarla pasar.

— Solo quiero hablar contigo, quiero aclarar todo lo que está pasando, sé que todo esto puede sonar extraño para ti, pero te juro que es complicado y ni siquiera yo lo entiendo y... —Hailee solo se limitó a dejarla pasar, ya que Camila se veía bastante agitada y agobiada.

— Bien, soy toda oídos —Hailee tomó asiento en el sofá y Camila en la mesa de centro, frente a ella.

— Primero que nada, debo decirte que me gustas, pero ahora mismo no puedo tener una relación contigo porque estoy en medio de un contrato que no me permite tener una relación con una persona de la industria que no sea...

— Lauren —completó Hailee y solo rió—. Camila, yo lo sé todo, Lauren me lo contó, el hecho de que yo haya actuado de esa manera es porque al parecer sí, dices que te gusto y tú también me gustas a mí, pero pareciera que estar conmigo es más una obligación que un gusto. Respeto el hecho de que no quieras que nos vean juntas en la calle, pero me duele que cuando estamos solas pareciera que solo estoy yo.

— Lo sé, y lo siento, pero es que tengo tantas cosas en la cabeza. Quiero hacer las cosas bien contigo...

— Pero también debes de hacer las cosas bien contigo misma, Camila —Hailee recargó sus codos sobre sus piernas y miró fijamente a Camila—. Me agradas, me gustas, pero es obvio que tienes tus cosas, y yo estaría fascinada con ser parte de esas cosas, pero a veces pareciera que apartas a todos y te encierras en tu burbuja, y yo no puedo soportar la idea de no poder hacer nada al respecto, o estar bien, cuando tú no lo estás. 

 Fue cuando Camila entendió muchas cosas que eran bastante ciertas, ni siquiera sabía qué era lo que estaba haciendo ahora mismo. Ya habían pasado bastantes meses desde que el contrato había comenzado. No podía dejar las cosas así, pero ni siquiera sabía qué camino tomar, pero por el momento no le quedaba mucha opción. Pero tampoco podía soportar el hecho de que Lauren estuviese tan distante con ella, era algo que le ocasionaba cierto dolor de cabeza.

— ¿Por qué huiste? —preguntó Lauren mirando fijamente a Camila, quien acababa de entrar al apartamento. Lentamente Camila se acercó hasta donde estaba la ojiverde, colocó ambas rodillas al exterior del regazo de Lauren, tomando asiento a horcajadas de ella. 

— Quieres jugar —susurró Camila tomando del cabello a la pelinegra, jalando de éste hacia atrás para dejar libre su cuello—, pues juguemos.

 Llevó sus labios hasta el cuello de ésta, esparciendo besos desde su mandíbula hasta su clavícula, yendo del lado derecho hasta el izquierdo, moviendo levemente sus caderas sobre Lauren.

— Te odio —Murmuró Lauren, se estaba resistiendo, no quería agarrarla de las caderas, pero se rindió, tomándola de las caderas para hacer el movimiento un poco más rápido, sintiendo cómo la pelvis de Camila pegaba con la de ella. Haciendo presión con sus manos, encajando sus uñas sobre la tela del pantalón de Camila, sintiendo la piel de la latina a través de ésta. 
 Camila descendió sus manos por el cuello de Lauren, llegando el borde de la blusa de Lauren, tomándola con fuerza para romperla por el medio, dejando al descubierto el pecho y abdomen de Lauren. No pudo evitar reír con maldad al ver la cara de indignación de Lauren.

PR ~camrenWhere stories live. Discover now