Contra Ataque. [Cahwi]

7: Chico travieso.

Caín es un hombre amable. Todos lo sabían y esto era en cierta parte verdad pero Caín también tenia en cuenta algo, desde hace mucho tiempo cuando las personas se dirigían a él como alguien amable e inocente era porque realmente no tenía ningún defecto, era perfecto en toda la extensión de la palabra.

Incluso lo habían catalogado como alguien tierno, calmado, amoroso y qué no se dejaba llevar por sus instintos.

Sin embargo, Caín sabía que no era tan cierto todo eso, había algo que destruía toda su imagen tierna y era su sed de sexo, Caín al tener sangre canina sus impulsos sexuales eran muy altos.

Por eso aún seguía pensando en aquel gatito y su excelente propuesta.

Caín miró el número de Yahwi en su teléfono nuevamente, lo guardó nada más por curiosidad pero no lo llamaría, solo lo dejaría ahí. Removió sus cabellos lleno de frustración y suspiró mientras esperaba a Jooin.

— ¿Por qué sigo pensando en eso? — Se preguntó aún bastante confundido.

¿Debería...?

Movió ligeramente su cabeza sacando todo pensamiento de eso, no debía ni siquiera tener eso como opción, era una mala idea y más ahora que era pareja de Jooin, no quería hacerle daño.

Jooin lo era todo para él y haría lo que sea para que fuese feliz.

— ¡Caín!

Levantó la vista encontrándose con aquel tierno chico que tanto amaba, su corazón latió con rapidez y se levantó para abrazarlo.

— No pensé que vendrías a recogerme.

— Solo pasaba por aquí así que decidí venir. — Lo abrazó con más fuerza. — Te extrañé mucho maestro.

Jooin se sonrojó ante esas palabras. — Y-Ya veo...

De repente escuchó una risa vaga a lo lejos, su mirada de enfocó en Phill que lo observaba con burla y luego Pronunció lentamente con sus labios.

Bastardo mentiroso.

Caín leyó los labios del rubio quien solo negó riendo y se fue desapareciendo por la multitud de estudiantes.

— ¿Caín?

El castaño se separó un poco pero Caín borró su mala cara y le sonrió.

— ¿Vamos?¿Quieres comer algo? — Preguntó tiernamente tratando de olvidar lo que acabó de pasar.

— Solo vamos a casa... — Movió sus pequeñas orejas de ardilla con un leve sonrojo. — Quiero pasar tiempo contigo.

El rubio tomó su mano y caminaron de vuelta a casa, Caín dejo de pensar en Yahwi y en todo lo que pasó, no iba a dejar que eso afectara su relación con Jooin, solo se dedicó a sonreírle a su amado novio.

Nada va a dañar este momento. - Pensó con una linda sonrisa.

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Llegaron a casa y como de costumbre Caín hizo algo de comer, decidieron ver una película y relajarse un buen rato en la calidez de su hogar.

Jooin le miró de reojo a su novio aún sin poder creer que ahora estaban juntos, se sentía muy feliz y satisfecho, todo estaba bien entre ellos, su relación era buena, Caín era tan amable y hasta en la cama (de las pocas veces que lo han hecho) era tan tierno con él.