C43: " Te vas a arrepentir"

2.3K 182 3
                                    

Era de madrugada aún, no podía conciliar el sueño. Mi mente vaga entre los recuerdos que tenía de Kendall y yo. Sabía cuál era mi propósito pero era complicado recordar todo el enojo que sentía hacia ella al verla dormir a mi costado tan pacifica y tierna. Ella dormía boca abajo y su espalda desnuda era bañada por la luz de la luna. Me puse de pie y baje a la cocina por un poco de agua, cada que me besaba o me tocaba recordaba todo el dolor que sufrí por ella y solo quería alejarla de mi y decirle que se fuera al carajo pero eso sería muy sencillo para ella, debe sufrir como lo hice yo por años. Después subí de nuevo y me recosté a su lado observando todo su rostro en calma.

— ¿Sabes que las miradas se sienten, verdad? - Pregunto Kendall aún adormilada.

— Lo siento - Me disculpe y mis mejillas ardieron.

— No te disculpes, no me molesta - Rodó sobre su cuerpo y quedo de frente a mi. — De hecho cuando estabas molesta conmigo y no podías siquiera mirarme, me mataba. Así que ahora saber que estás conmigo aquí y me miras mientras duermo es un sueño — Se apoyo con sus codos y alzo su cuerpo para besarme.

Diablos ella era buena en esto, si no supiera lo que en verdad es, podría creerle. Tome su mejilla y la acaricié sin romper el beso.

— Ahora estoy aquí, ya no debes preocuparte por eso - envolví mis brazos alrededor de su cuerpo y ella escondió su cabeza en mi cuello. Nos volvimos a dormir hasta que el sol se asomaba por las ventas de la habitación.

Mi celular y el de ella timbraron y se iluminaron al mismo tiempo. Nos pareció extraño y volteamos a vernos confundidas. Me separé de ella y tome ambos celulares, le di el suyo y observé el mío.

"Hoy abra cena en mi casa, las quiero a todas ahí. Sin excepciones, si estoy hablando de ti Kai" — Kris Jenner.

— Mierda - Exclamé soltando mi celular en la cama, de por si era difícil aguantar estar con esta idiota ahora imagínense estar con las otras cuatro perras todas juntas en una cena.

— Suena importante o mamá no hubiera pedido explícitamente que fueras - Comento Kendall recargándose en mi pecho de nuevo.

Si claro que debe serlo o no me hubieran invitado — Parece que si es importante, ¿Me pregunto que querrá? - pasaba sus manos de arriba abajo por todo mi pecho y dejaba algunos besos en el. Yo solo pensaba en sacármela de encima.

El solo hecho de pensar en tener que estar por unas horas con ellas en una estupida cena, hacia que quisiera vomitar.

— No tengo la menor idea, Kris es tan impredecible - Aún besaba mi cuello y poco a poco se recargaba más en mi, no podía soportarla más.

— Kenny - La llame pero me ignoró — Amor, debes parar - Pedí de nuevo y ella hizo caso omiso a mis palabras — Kendall, basta - Tome sus brazos con algo de fuerza y ella se separó de mí confundida.
— Lo siento, no quería ser tan brusca es solo que no me ponías atención, creo que debo irme ya. Tengo algunos pendientes que hacer antes de ir a casa de Kris.

— Oh, está bien - Contestó decepcionada. Mierda no puedo arruinar el plan cuando apenas acaba de comenzar.

— Pero a penas termine venderé a verte y podemos irnos juntas, ¿Que te parece? - Una enorme sonrisa se formó en su rostro.

— Está bien, aquí te espero amor - Me acerque rápidamente a besarla y salí casi corriendo de ahí.

No podía estar más tiempo con ella, siendo tan amable y fingiendo que realmente me importa. Ella fue una perra egoísta y no se preocupó un segundo en mis sentimientos y hasta me ofende lo rápido que creyó que regresaría con ella, aún debe pensar que me tiene a sus pies como cuando tenia dieciséis.

Conducí lo más rápido que pude directo a mi apartamento, necesitaba un trago urgente. Me ponía nerviosa pensar en que quería esa mujer y también en cómo se comportaría Kendall ahora conmigo, no me sorprendería si regresa a su actitud antipática hacia mi.

Baje de mi auto y entré a mi departamento, me alarmé al escuchar sonidos proviniendo de mi cocina. Con suma cautela me aproxime y me encontré a Jhonatan comiéndose mis cereales como de costumbre.

— Maldito imbecil, casi me da un paro cardíaco - El se sobre exaltó y después se rio.

— Lo siento pero toque varios minutos y nadie abrió, utilice la llave que tengo - Se excusó riendo.

— ¿Tienes llave de mi departamento? - Cuestione con una ceja alzada.

— Si, olvidaste tus llaves en mi casa y las conservé - Murmuró nerviosamente.

— Sabes que ahorita no quiero hablar sobre esto, he tenido un día de mierda y eso que apenas es medio día - Coloqué mis dedos en mi sien y frote el lugar.

— Y eso, se puede saber porque - Pregunto acercándome un vaso de whisky.

Tome el trago y lo bebí de una — Kendall, eso es lo que me pasa - Jhonatan conoce perfectamente mi situación con ella, le conté todo incluso mi plan, el no está del todo de acuerdo pero me apoya.

— Siendo honesto no pensé que de verdad lo harías - Confeso sirviendo un poco más de whisky en mi vaso.

— Ella merece sentir lo mismo que yo, fueron 5 años de dolor y eso que no estoy contando los que tuve antes de nosotras - Jhonatan negaba con la cabeza.

— Yo solo digo que esto puede salir mal y no solo para ella. Se ve a kilómetros que aún la amas, aunque tú quieras negarlo - Jhonatan se equivoca y aún que tuviera razón el rencor que siento por ella es más fuerte que cualquier otra cosa.

— Mejor vete, tengo cosas que hacer y no tengo tiempo - El tomo una caja de cereales y salió por la puerta negando.

— Te vas a arrepentir de hacer esto, ya lo verás - fue lo último que dijo antes de salir.

Mi cabeza empezó a doler y mi cuerpo a sentirse cansado, sin duda alguna estas mujeres sabían como descontrolarme. Entre a mi baño y saqué una pequeña bolsa de plástico con mi polvo especial. Forme una línea con mi tarjeta de crédito y enrollé un billete, absorbí todo la línea de un solo suspiro y por fin me relajé. Me noqueo por completo y quede en un sueño profundo en mi cama.

🌙

Al Límite Where stories live. Discover now